Muerte sin anunciar en la obra de la M-30

El cadáver de Gerineldo Feliz González, obrero de 36 años, viaja hoy a 30.000 pies de altura camino de la República Dominicana. Allí, en su lugar de origen, será enterrado. Su mujer le acompaña en el largo viaje hasta el país caribeño. Arriba el luto, y a ras del suelo, la polémica. Gerineldo Feliz murió el pasado 9 de septiembre aplastado en las obras del bypass sur de la M-30, pero la muerte no trascendió hasta días después, cuando la hizo pública CC OO. Un primo del fallecido había acudido al sindicato a contar el suceso.

Los sindicatos, y también PSOE e IU, denuncian que el Ayuntamiento (PP) y la empresa que realiza los trabajos se han callado la muerte para limpiar la imagen de la gran obra de esta legislatura. Desde el Consistorio, un portavoz argumentó que la propia ambulancia de la obra fue la que trasladó al hombre, moribundo, hasta el hospital Doce de Octubre y que no intervinieron los servicios de emergencias municipales. "Cuando el obrero falleció, el hospital informó al juzgado. La empresa para la que trabajaba también lo ha hecho a la Consejería de Empleo. La inspección de Trabajo ya ha acudido a investigar lo ocurrido", señaló el portavoz. Gerineldo Feliz, casado y con cuatro hijos, murió aplastado mientras manipulaba una cesta elevadora. No hubo testigos del accidente.

Comisiones Obreras asegura que el Ayuntamiento tenía que haber informado del accidente "en la comisión de seguridad que tenemos sobre la M-30". "Y no lo hizo", denuncia Víctor García, portavoz del sindicato. "Creemos que lo han ocultado porque el obrero estaba trabajando en sábado, cuando en la construcción, salvo que se tenga un permiso especial, está prohibido trabajar los fines de semana", apostilló García. Desde el Consistorio replicaron: "En las obras subterráneas es habitual trabajar las 24 horas del día y los siete días de la semana".

PSOE e IU exigieron al Gobierno municipal la entrega de la relación de accidentes laborales que se han producido en la M-30 y la apertura de una investigación. Los sindicatos afirman que la muerte de Feliz González eleva a cinco los obreros muertos en las obras de la M-30 desde que éstas comenzaron: en otoño de 2003. Sobre la cifra total de obreros muertos en 2006 hay discrepancias. El último balance que hizo la Administración regional, a finales de agosto, afirmaba que habían muerto 98 personas. UGT eleva la cifra a 108.