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BAIX LLOBREGAT | Los efectos de los fenómenos atmosféricos sobre el territorio

El desafío continúa

El Baix Llobregat se ha puesto en los últimos años manos a la obra para acabar con el problema de las inundaciones. Hasta hace muy poco, éste era el gran contratiempo de Castelldefels, por ejemplo, que las ha sufrido especialmente.

El municipio ha soportado bien el último aguacero, gracias a las medidas que empezaron a aplicarse después del desastre de 2002. Ese año, el barrio de Montemar se inundó en dos ocasiones y una cuarentena de familias tuvieron que ser realojadas en hoteles. Las fuertes lluvias convirtieron la avenida Constitució, cercana a la playa, en algo semejante a un lago por el que circulaban barcas, y la C-31 permaneció dos días cortada porque su calzada era una piscina. La C-31 y la C-32 se habían construido sobre muros de cemento sin que ningún colector evacuara las aguas. A modo de barrera, la C-31 impedía el paso natural del agua desde las urbanizaciones situadas en la montaña hasta el mar.

Las administraciones han invertido casi 30 millones de euros en solucionar el problema de Castelldefels. Se ha construido un nuevo paso subterráneo bajo la C-31. También dos colectores en Ca n'Aymeric y Bellamar. Falta aún el que se encargará de recoger toda el agua que desciende de las urbanizaciones. Las obras, con un presupuesto de 11 millones de euros que pagará Agencia Catalana del Agua, empezarán en octubre.

Cornellà ha sido históricamente un lugar conflictivo debido a que el terreno desciende hasta la ribera del Llobregat. Aún queda en el recuerdo la imagen del río desbordado en 1971, cuando el agua llegó hasta el mismo centro del municipio. Las protestas de los ciudadanos lograron finalmente que la Administración de entonces canalizara el río.

En 1999 se repitieron las inundaciones en los barrios de Almeda y Gavarra. Hace sólo un mes se inauguró un gran depósito de aguas pluviales y, aprovechando las obras de urbanización del Trambaix por la carretera de Cornellà, se ha construido un gran colector que recoge las lluvias desde lo alto de la C-245, en el término municipal de Esplugues, y las canaliza hasta el depósito.

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