El presidente de Senegal detiene en el último momento las repatriaciones de 'sin papeles'

Una decisión personal del presidente de Senegal, Abdoulaye Wade, obligó a última hora de ayer al Gobierno español a suspender la salida de dos vuelos de repatriación con un centenar de sin papeles cuya llegada a Dakar estaba prevista para las primeras horas de la madrugada de hoy. Dos días después de la visita relámpago del secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Bernardino León, a Dakar y de que el inicio inmediato de las deportaciones trascendiera a los medios de comunicación españoles, Wade dio marcha atrás en el último momento.

La vuelta de los senegaleses que lograron alcanzar las costas españolas en cayuco es para el Gobierno de Senegal un asunto delicado. Tras el primer vuelo de repatriación, que se produjo el pasado mes de mayo, las fuerzas de seguridad del país africano tuvieron que hacer frente a varias protestas que en algunos casos fueron violentas, y a fuertes críticas de algunos medios de comunicación. Senegal es el país desde el que salen la mayoría de los extranjeros que llegan a Canarias en embarcaciones. Tiene 700 kilómetros de costa y 100 puntos de salida de cayucos con destino al archipiélago.

Un sector importante de la población vive de las remesas que envían sus parientes en España y otros muchos esperan en los embarcaderos para partir en cayucos por unos 400 euros. El Gobierno senegalés, según fuentes españolas, es muy sensible a esos sectores y las elecciones presidenciales y legislativas, en las que Wade volverá a ser candidato, se celebrarán en febrero. El ministro del Interior, Ousmán N'Gom, se negó el pasado martes a dar una fecha de llegada de los vuelos, pero se mostró dispuesto a colaborar con las autoridades españolas. El coronel Aloune Waye, portavoz de la Policía Nacional de Senegal, había admitido que los vuelos desde España podían plantear problemas.

Ayer, varios medios de comunicación senegaleses se mostraron muy críticos con el acuerdo firmado con España. Criticaban al Gobierno por haber aceptado una primera contribución de España de 20 millones de euros para financiar el programa REVA (Retorno a la Agricultura), lanzado este año por el Gobierno de Wade para alentar a la juventud senegalesa a permanecer en su país, informa la agencia Efe.

En un comentario editorial, la emisora Radio Futurs Media (RFM) tildó la operación de "trueque vergonzoso". "10.000 senegaleses negociados por 20 millones de euros", tituló el periódico independiente L'Office.

Los contactos entre el Gobierno de Senegal y la Embajada de España en Dakar se intensificaron durante toda la tarde de ayer hasta que el presidente dio el no definitivo. Ambos Gobiernos estudian ahora la posibilidad de que los vuelos no lleguen a Dakar, como estaba previsto, sino a otros aeropuertos del país. Una de las posibilidades que se barajan es enviarlos a Saint Louis. Fuentes de Interior aseguraron ayer que en caso de que se acepte finalmente ese destino, las deportaciones podrían comenzar inmediatamente, aunque hacia la una de la madrugada de hoy, esa posibilidad aún no se había concretado.

Varios agentes senegaleses trabajan en Canarias para identificar a los 10.000 ciudadanos de ese país que se encuentran en los centros de retención del archipiélago. Hasta el momento han sido identificados más de 2.000, que en principio, iban a ser repatriados en los próximos días.

Los dos vuelos abortados ayer a última hora tenía previsto devolver a Dakar a un centenar de inmigrantes. Su despegue estaba previsto desde Fuerteventura a las diez de la noche. En cada uno de ellos iban a viajar 50 inmigrantes, custodiados por 80 policías. La llegada del primer vuelo, un charter de Air Europa, estaba prevista para la 1.35 de la madrugada, hora española (23.35 hora local). España consideraba crucial la respuesta de la población a estos dos vuelos.

Wade tenía previsto esta madrugada ofrecer una rueda de prensa conjunta con el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, en el aeropuerto de Dakar.

Tras conocer la suspensión de los vuelos, un portavoz del Gobierno de Canarias lamentó que ésta se hubiese producido "porque era una parte esencial para resolver el colapso de Canarias", informa Juan Manuel Pardellas.