Una estatua de Sant Jordi y una imagen de la Virgen de Montserrat, desaparecidas del Palau de la Generalitat

En el Palau de la Generalitat ha desaparecido la estatua de Sant Jordi que presidía la capilla del mismo nombre que estaba ubicada encima de la escalinata principal, y también la imagen de la Virgen de Montserrat situada en el salón del mismo nombre del Palau y que constituye la antesala del despacho del presidente catalán.

"Desde hace tres años, no sabemos nada de estas imágenes", afirma el profesor de Protocolo de la Universidad de Barcelona y asesor del arzobispado, Eduard Subir.

"En el salón de la Virgen de Montserrat se celebraban firmas de convenios, juramentos de los consejeros, recepciones del presidente, pero ya no está esta magnífica imagen y nada se sabe ella desde tiempo: el antedespacho se ha reconvertido en varios despachos", sostiene Subir. Lo mismo puede decirse, señala, de la imagen de Sant Jordi, que fue sacada para una exposición que se celebró en el Parlament. "Era una imagen antiquísima de Sant Jordi, de plata, articulada y con las manos y la cara de porcelana. Ahora queda sólo el tapiz de la escuela flamenca".

Tras la exposición en el Parlament, la imagen no regresó al Palau de la Generalitat, y en su lugar se ha colocado una imagen, "que, a nuestro parecer es la de San Miguel y no de Sant Jordi, y la han colocado en un lateral de la capilla", señala Subir.

Por todo ello, Eduard Subir piensa que se trata de un acto de "iconoclastia" el que se ha hecho, pues no se sabe dónde están estas imágenes. El traslado de las imágenes se hizo sin el consentimiento del prior de la capilla, Enric Jarque, precisa.

El profesor Subir solicita públicamente que se abra una investigación para saber dónde se encuentran las obras de arte citadas, pues él no ha conseguido averiguar su paradero a pesar de sus múltiples investigaciones al respecto.