Annan: las armas callarán el lunes a las ocho

El secretario general de la ONU, Kofi Annan, anunció esta madrugada que el alto el fuego en Líbano entrará en vigor mañana a las 05.00 GMT (las 08.00, hora local en aquella región). Poco antes, los primeros ministros israelí, Ehud Olmert, y libanés, Fuad Siniora, le habían comunicado su acuerdo. Aunque satisfecho, Annan aseguró que "sería preferible que la lucha cesara ya, para respetar el espíritu de la resolución del Consejo de Seguridad, cuyo objetivo era salvar la vida de los civiles de ambos lados".

La resolución 1.701, adoptada por el Consejo en la madrugada de ayer, tardó cuatro semanas en negociarse. La fuerza militar internacional, que deberá ayudar a establecer las condiciones de una paz duradera, no será multinacional y de combate, sino que tendrá como base la actual Fuerza Interina de la ONU en Líbano (FINUL), que pasará en breve de 2.000 soldados a 15.000. Su mandato será el siguiente:

- Supervisar el cese de las hostilidades. Acompañar y apoyar el despliegue de las Fuerzas Armadas libanesas al sur del país conforme se retire el Ejército israelí.

- Garantizar el acceso de la población a la ayuda humanitaria y el retorno de los desplazados.

- Asistir al Ejército libanés en la desmilitarización de las milicias y en el control de las armas.

En cuanto a los parámetros para una solución estable se establecen los siguientes elementos:

- Pleno respeto de la línea azul por las dos partes.

- Acuerdos para evitar la reactivación de las hostilidades, como el establecimiento de una zona tampón, entre la franja de protección y el río Litani, libre de personas armadas que no sean del Ejército libanés o FINUL.

- La plena aplicación de los acuerdos de Taif y de las resoluciones 1559 y 1680 sobre la desmilitarización de las milicias, incluyendo a Hezbolá, que se reservó el derecho a seguir armada mientras durase la ocupación de las granjas de Chebaa.

- No podrá haber de fuerzas extranjeras en Líbano sin consentimiento de su Gobierno.

- No podrán venderse armas a Líbano, excepto las autorizadas por su Gobierno.

- La entrega a la ONU de todos los mapas de minas terrestres en posesión de Líbano e Israel.

En las condiciones no se hace mención al asunto de los prisioneros. Se deja para el preámbulo de la resolución, donde se enfatiza la necesidad de la "liberación incondicional" de los soldados israelíes secuestrados.

Sobre la definición de los límites internacionales de Líbano, uno de los puntos más debatidos, se pide que la ONU presente en 30 días una propuesta para resolver las disputas fronterizas, en concreto sobre las granjas de Cheeba, bajo control de Israel desde hace cuatro décadas.