El IVAM asegura ahora que retirará la escultura de Alfaro de la azotea
Ana Noguera censura el abandono de la obra artística en el tejado
Cosmos 62 bajará de la azotea. La escultura de Andreu Alfaro que el IVAM almacena en su tejado desde 1999 será instalada en un jardín interior del museo este mismo mes, según indicó ayer la directora del centro, Consuelo Ciscar, justo el día siguiente de que este diario publicara cuál ha sido la ubicacion de la obra del escultor valenciano durante los últimos siete años. La portavoz de cultura del grupo socialista, Ana Noguera, señaló ayer que la situacion de la escultura en la terraza es "un descrédito y una falta de respecto" hacia su autor.
La escultura se encuentra situada entre salidas de aire y equipos de refrigeración y parte del remate superior sobresale ligeramente sobre la cornisa de la fachada del edificio que recae a Guillem de Castro, por lo que se puede observar a pie de calle.
La directora del IVAM, Consuelo Ciscar, indicó ayer que tras ser "rescatada" de donde se exhibía, en una urbanización del Calp, fue instalada en la explanada del IVAM en 1992 con motivo de una de las exposiciones de la colección del museo, pero un incidente con unos niños que se subieron a ella obligó a la dirección a retirarla de la vía pública. En 1999 se decidió trasladarla provisionalmente al tejado mientras se ejecutaban obras de ampliación en la sala 7 del museo, aprovechando que sus materiales, resistentes a las inclemencias ambientales, no requieren "un cuidado especial".
Tras hacerse público el olvido de la escultura en el tejado, la dirección del IVAM señaló ayer que la trasladará definitivamente a su ubicación prevista, una vez la escultura que ocupaba el citado jardín, obra del también valenciano Miquel Navarro, decora actualmente unas instalaciones judiciales de Valencia. Ciscar recordó que el proyecto de ampliación del museo contempla un jardín escultórico en la nueva terraza.
La portavoz de Cultura del grupo socialista en las Cortes, Ana Noguera, señaló a Efe que este hecho es "un descuido tremendo y el reflejo de una nefasta e ineficaz gestión por parte de Ciscar". A su juicio, este museo "vive de la herencia" socialista de finales de los años ochenta, cuyos gobiernos lo situaron entre los centros de arte contemporáneo más relevantes de España y Europa.
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