La UE pide "el cese inmediato de hostilidades"

La Unión Europea se puso ayer por fin de acuerdo para pedir "el cese inmediato de las hostilidades" en Líbano, "seguido de un alto el fuego sostenible" que permita el despliegue de una fuerza multinacional de paz en el país. El acuerdo se alcanzó tras cuatro horas de discusión y fue unánimemente presentado por los distintos ministros de Exteriores comunitarios, conscientes de que la UE se jugaba su credibilidad, como muestra de la existencia de la Europa política. Los Veinticinco consideran factible que el Consejo de Seguridad apruebe el próximo fin de semana la resolución que reclame el fin de la violencia.

Los ministros reconocieron la existencia de una cierta confusión terminológica entre cese inmediato de hostilidades y alto el fuego. El ministro español, Miguel Ángel Moratinos, explicó que "el cese inmediato de hostilidades" es "lo que la UE puede pedir, que no haya ni un tiro más, ni un bombardeo más", frente al más complejo "alto el fuego" que supone un compromiso de la partes implicadas que la UE no puede garantizar que se alcance.

Buena parte de la discusión interna estuvo centrada en la terminología, después de que se rechazara la propuesta inicial de la presidencia finlandesa de pedir "un alto el fuego inmediato".

Concluidas las discusiones, todos los ministros insistieron en la importancia de que la UE hablara ayer con una sola voz y que fuera capaz de asumir sus responsabilidades, después de que en otra reunión del pasado día 17 los mismos protagonistas no lograran ponerse de acuerdo para pedir ya fuera un alto el fuego o un cese de hostilidades.

Josep Borrell, que ayer presidió una reunión extraordinaria de los jefes de grupo del Parlamento Europeo en la que se reiteró otra petición anterior de alto el fuego inmediato, había apuntado que "sería un fracaso de la UE el que fuera incapaz de pedir el fin de las acciones militares de ambas partes".

Diálogo con Irán y Siria

"Está claro el compromiso de la UE y que tiene capacidad política y diplomática", insistió Moratinos, quien adelantó que se ha dado un mandato a Javier Solana "para negociar con todas las partes, sin excluir a ninguna". Según él, "hay que volver a reincorporar a Siria y tener diálogo con Irán", los dos grandes valedores de la guerrilla. Moratinos hablará hoy con Hezbolá, durante un almuerzo en Beirut al que el primer ministro libanés, Fuad Siniora, ha invitado a todo su Gabinete, lo que incluye a los ministros de Exteriores y Energía, ambos miembros de la milicia.

Moratinos y Solana atribuyeron el eventual llamamiento a un cese de hostilidades por el Consejo de Seguridad a finales de semana a que cinco miembros de la UE, un tercio del total, son miembros del Consejo y van a trabajar para sacar adelante la idea. "Espero que tengamos un enriquecimiento de la resolución por parte de EE UU", agregó Philippe Douste-Blazy, jefe de la diplomacia francesa, país que ha presentado ya un borrador de resolución. En las conclusiones de la reunión de ayer también se señala, a petición española, que "no hay solución militar para los problemas a que se enfrentan los pueblos de la región".