Rechazadas todas las peticiones de nulidad en el 'caso Ollero'

La Audiencia de Sevilla rechazó ayer todas las cuestiones de nulidad e indefensión planteadas por las defensas de los cuatro acusados en el caso Ollero por el presunto pago de comisiones en carreteras andaluzas y admitió como prueba la confesión de un intermediario ya fallecido.

Los acusados -entre ellos el ex director general de Carreteras de la Junta Manuel Ollero- se acogieron a su derecho a no declarar y manifestaron que habrían hecho lo mismo en sus primeras declaraciones de haber sabido que los pinchazos eran ilegales.

La Sección Primera de la Audiencia rechazó todas las cuestiones de nulidad planteadas por las defensas y además admitió como prueba la confesión del intermediario Pedro Llach, fallecido en 1998 durante la instrucción de la causa, lo que dio lugar a nuevas protestas de nulidad porque, según las defensas, esa declaración se obtuvo merced a los pinchazos telefónicos.

El Tribunal Constitucional anuló las escuchas telefónicas en las que se basó la primera condena, emitida en 1999, por lo que ahora ni la Fiscalía ni la acusación particular que ejerce la Junta de Andalucía acusan al ex consejero socialista de Obras Públicas Juan José López Martos, absuelto por la Audiencia de Sevilla y luego por el Tribunal Supremo.

En la jornada de ayer se escuchó las declaraciones policiales y judiciales de Llach, quien reconoció que trabajaba como intermediario, que la obra Salinas (Málaga)-Pedriza (Granada) adjudicada a Ocisa fue una por las que percibió comisiones e incluso pormenorizaba el reparto de los varios millones de pesetas que percibió.