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Ciutat Vella comprará los locales comerciales vacíos para decidir su uso y evitar guetos

Lluís Pellicer

El distrito Ciutat Vella, a través de la sociedad Foment de Ciutat Vella (Focivesa), comprará locales comerciales de sus barrios para decidir sus usos y evitar que se formen "guetos comerciales". El vicepresidente de la empresa de capital mixto, Emili Sarrión, explica que no se trata de "expulsar a nadie", sino de evitar la concentración de establecimientos de un mismo uso en una zona, por ejemplo locutorios, oficinas bancarias o tiendas de recuerdos. Fuentes del distrito afirman que la medida se llevará a la sesión plenaria del próximo 6 de julio.

La idea de la compra de establecimientos desocupados parte de una fórmula que el Ayuntamiento empleó con unos locales ubicados en edificios municipales de Santa Caterina. En este caso, el consistorio decidió el uso de estos espacios, y no ningún tercero. Ciutat Vella ha adoptado esta decisión en un momento en el que varias tiendas han cerrado por no contar con un relevo generacional.

En muchos casos, estos negocios se han sustituido por tiendas de recuerdos, sobre todo en La Rambla y a pesar de que el plan de usos restringe nuevas aperturas de estos establecimientos. El director de Comercio y Consumo del Ayuntamiento de Barcelona, Albert González, explica: "El plan de usos de 1998 regulaba e impedía la proliferación de tiendas de recuerdos, de cambio de moneda y de restaurantes de comida rápida para evitar el empobrecimiento de la zona", explicó. Sin embargo, los tenderos hallaron la fórmula de saltarse la normativa. "Piden licencias de actividad textil, y lo que despachan son camisetas del Barça", agregó.

Focivesa será la encargada de la compra de locales. Lo hará a través de una oferta pública de compra. Es decir, anunciará su disposición a adquirir comercios de zonas concretas del distrito a una horquilla de precios determinada. Las asociaciones de comerciantes, que han insistido para que se adopte esta decisión, asesorarán luego a la sociedad sobre los criterios de concesión de los establecimientos, aunque la iniciativa será siempre de Focivesa para garantizar que no haya especulación.

Los tenderos del eje Barcelona de Palau a Palau -que engloba los barrios de Santa Caterina, Sant Pere y el Born- quieren que los locales de la calle de Sant Pere Mitjà, por ejemplo, sean sobre todo de artesanía para revitalizar el entorno. "La idea es que en un sitio no se concentren 12 oficinas bancarias o locutorios, sino que en todos los barrios haya una mixtura de tiendas en la que tenga peso el comercio locomotora", asegura el presidente de este eje, Xavier Andreu.

"Deberán ser negocios con un plan de viabilidad y que no quieran adquirir el local para especular, sino que quieran permanecer en el barrio. En segundo lugar, deberán presentar un plan de negocio en el que demuestren que se comercializarán productos de calidad. En definitiva, un proyecto bien hecho que sirva para dignificar la zona", remachó Andreu.

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Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Nacional de EL PAÍS. Antes fue jefe de Economía, corresponsal en Bruselas y redactor en Barcelona. Ha cubierto la crisis inmobiliaria de 2008, las reuniones del BCE y las cumbres del FMI. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

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