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Balza revela que los datos enviados a la Audiencia Nacional son de 2002

EHAK acusa al consejero de "obstruir" el proceso y deja la comisión

El consejero de Interior, Javier Balza, aseguró ayer en el Parlamento que la Ertzaintza no tiene en la actualidad "ninguna información sobre ningún local" que la ilegalizada Batasuna esté utilizado orgánicamente. Balza precisó que la información que ha enviado a la Audiencia Nacional con datos de 40 locales abertzales para que determine si pertenecen a Batasuna es de 2002. El consejero hizo esta afirmación durante una comparecencia ante la Comisión de Interior de la Cámara a petición de EHAK, que reclamó su dimisión.

Durante la comparecencia, el parlamentario de EHAK Julián Martínez acusó al consejero de "obstaculizar el proceso" de paz con las actuaciones de la Ertzaintza relacionadas con el mundo de Batasuna. Tanto Martínez como la parlamentaria de su grupo presente en la comisión, Itziar Bazterika, abandonaron la reunión tras exigir a Balza que "deje el cargo" para que lo ocupe alguien que "crea en la democracia y dé pasos a favor de la paz".

El consejero calificó esa actitud como "el mayor ridículo parlamentario" que ha visto en su vida y una "pantomima".

El enfrentamiento parte de una respuesta parlamentaria enviada por Balza al PP el 8 de mayo sobre el cumplimiento del auto del juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska que ordenó el cierre de sedes de Batasuna. Interior precisaba que la Ertzaintza había enviado datos sobre dichos 40 locales.

Martínez, quien hizo constantes referencias al alto el fuego de ETA, destacó que estas actuaciones de la Ertzaintza eran "imposibles de entender" antes de ese hecho "y mucho menos después". Sostuvo que la decisión de Balza ha provocado "alarma social", pues "muchas personas están en riesgo de ser encarceladas" por una actuación derivada de "criterios políticos y partidistas". Criticó que el consejero argumente que la Ertzaintza respeta las leyes, porque eso es una muestra de "cobardía política" y acto seguido abandonó la sala con su compañera. Socialistas, EA y PP censuraron su actitud.

Balza mostró sus dudas de si el parlamentario de EHAK se hallaba en un "enorme error" o diciendo una "mentira" al situar esta actuación de la Ertzaintza en un "nuevo contexto", en referencia al alto el fuego, porque esos informes se elaboraron y remitieron al juez Baltasar Garzón, anterior titular del juzgado de Marlaska, en septiembre de 2002, dato que no figuraba en la respuesta parlamentaria.

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El consejero insistió en que lo ocurrido supone un nuevo "espectáculo para mantener un discurso deslegitimador de la Ertzaintza", e insistió en que ni el Cuerpo Nacional de Policía, ni la Ertzaintza, ni la Guardia Civil poseen actualmente datos de ningún local de Batasuna y, si los tuvieran, los remitirían al juez.

Balza hizo esta precisión después de que el popular Carlos Urquijo sostuviese que es "evidente que hay otras sedes" además de las 15 clausuradas por la Ertzaintza sobre las que "no ha hecho absolutamente nada". El consejero concluyó que el discurso del PP "se complementa perfectamente" con el de EHAK, cuando éstos dicen que se vulneran los derechos humanos y aquéllos que no se hace nada para cumplir la ley.

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