Prisión para los seis detenidos por la oleada de robos en las comarcas de Tarragona y Lleida

La titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Gandesa (Terra Alta) decretó ayer prisión incondicional sin fianza para los seis rumanos detenidos por la Guardia Civil el viernes en Maspujols (Baix Camp) acusados de múltiples robos en Tarragona y Lleida. Esta banda, que vivía en el bosque con más de una tonelada de objetos de toda clase presuntamente robados y listos para ser enviados a Rumania, está acusada de 25 robos -la Guardia Civil la hace responsable de más de 100-, de tenencia ilícita de armas, de 12 robos de vehículos y de asociación con fin delictivo.

Más de 60 agentes participaron el viernes en la desarticulación de la banda y atraparon a cinco personas de las seis personas que la integraban, todas de entre 25 y 30 años. Ayer el sexto integrante fue detenido en Reus (Baix Camp) cuando se disponía a vender su teléfono móvil, probablemente para conseguir dinero para huir.

Ante el juez, los detenidos se declararon inocentes y aseguraron que vivían en el bosque a la espera de encontrar trabajo, pese a las evidencias de culpabilidad que, según la propia defensa, aporta el extenso informe policial.

La juez de Gandesa se ha hecho cargo de la instrucción porque la primera denuncia contra los detenidos se presentó el 29 de noviembre pasado por el robo en un cajero automático de Horta de Sant Joan (Terra Alta). Después, el principal ámbito de actuación de la banda se situó entre el Baix Camp, el Priorat y Les Garrigues. La Guardia Civil ha aportado una investigación exhaustiva, con grabaciones de cámaras de seguridad y escuchas telefónicas, que sitúa a los detenidos en varios lugares donde se produjeron algunos de estos robos. Entre otros golpes, los acusados podrían estar detrás del robo de varios cajeros automáticos que trataban de arrancar de cuajo y de los 20 asaltos en una sola noche en El Vilosell.