Agresiones
¿Cómo puede ser que detengan a dos españolas en México, las metan en un autobús, junto con otra treintena de detenidos/as y, en el traslado a comisaría, sean golpeadas y violadas salvajemente por los policías durante cinco horas? Y, además, ¿cómo puede ser que sean amenazadas para que no denunciasen los abusos recibidos favoreciendo así la impunidad de sus agresores? Y, aún es más, ¿cómo puede ser que sean expulsadas del país y les sea prohibida la entrada en México durante cinco años?
Y, según mi opinión, lo peor de todo es que nadie va a hacer nada. Bueno, sí, sólo nos importa a los que nunca podemos hacer nada porque nunca nos escuchan. Solamente un periódico se ha hecho eco de la noticia. Esperaba que semejante atrocidad quedase reflejada en medios escritos y audiovisuales de todo el país, y no ha sido así. Lamentable. Y eso que ni las conozco ni vivo en su misma ciudad.
Si alguien se pregunta qué hicieron, les diré que trabajaban en defensa de los derechos humanos, y les preguntaré: ¿de verdad existe un delito que justifique tan atroz castigo.
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