"Al término inmigrante se le da una nota despectiva"

La de Finn Birger Lie es una imagen de inmigrante muy alejada de las pateras, de las colas para obtener papeles, de las estrecheces económicas y del envío de dinero a la familia que quedó a miles de kilómetros. Él mismo asegura que no se identifica con el término inmigrante. "Socialmente, se ha convertido en una palabra con toque despectivo, cuando es una palabra muy bonita que refleja a una persona muy valiente. Son personas que rompen con todo y emprenden una nueva vida, a muchos kilómetros de sus familias y su entorno", comenta Lie, que se declara "ciudadano del mundo".

España es el país de Europa donde residen más noruegos, asegura Lie, pero la mayoría en la costa mediterránea. Son pocos los que eligen el Norte para echar raíces y, por eso, su relación como grupo es escasa. "Vivimos integrados en la sociedad local. Realizamos escasas actividades juntos", explica.

"Me siento muy vasco, me encanta la comida de aquí y sufro cuando pierde el Athletic"

Sin embargo, Lie no siente nostalgia. "La zona noruega de donde procedo es bastante parecida al País Vasco. Cuando ha venido gente de allí de visita, se han sorprendido de este paisaje. Además, viajo una vez al año a ver a la familia", dice. También reconoce que ha adoptado muchas costumbres vascas, entre ellas la pasión por la comida. "Me gustan todos los platos de la cocina vasca y he aprendido a hacerlos".

Ya desde adolescente, Finn Birger Lie se acostumbró a viajar y a visitar otros países, debido a los estudios, principalmente. Ha estado en Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña y España, en distintas ocasiones. "He vivido muchos años fuera de mi país, iba y venía, y al final acabas perdiendo esa certeza de ser de un lugar. Ves otras cosas, conoces otras costumbres, y algo de esos países te influye y siendo una amalgama de todo ello", comenta.

Al País Vasco llegó en el año 1991 por primera vez, a estudiar un máster en la Universidad de Deusto. Recuerda la primera vez que vió Bilbao en su trayecto desde el aeropuerto: "Me recordó a las ciudades industriales del norte de Inglaterra". Él ha asistido a la transformación de la capital vizcaína, de la que se enorgullece como algo propio. "Hay mucho interés en Noruega con Bilbao, con su transformación. Se han organizado muchos viajes de estudios para acudir a verla".

En Bilbao estuvo cinco meses, que aprovechó también para aprender algo de castellano, y luego marchó a Nantes (Francia) a proseguir estudios. Pero su corazón se había quedado en la capital vizcaína y no tuvo más remedio que regresar a buscarlo. Había conocido a Jaione, la que hoy es su mujer.

Lie se estableció en Euskadi, donde afirma que "siempre" le han recibido muy bien, en 1993, un año antes de su boda. Con pocos conocimientos del idioma y con ningún contacto, comenzó su andadura profesional dando clases en inglés. "En Noruega el inglés es nuestra segunda lengua. Yo hablo, además. noruego, sueco, danés y alemán. Tengo suerte de tener mucha facilidad para los idiomas", reconoce, aunque aún no se ha atrevido con el euskera.

De entonces recuerda que fueron para él tiempos duros. "Era una época muy difícil, había mucho paro y yo era una persona que venía de fuera, de un país que apenas se conocía y con titulación en unos estudios que no se conocían entonces, márketing empresarial". Así que su primera colocación fue en la enseñanza, explica, en unos centros privados donde las clases se daban en inglés, impartiendo márketing y estrategia empresarial.

Pero poco después emprendió una labor paralela, realizando "estudios de mercado, redes comerciales y representación para empresas extranjeras, empresas de energía renovables noruegas", indica. Cuando este segundo trabajo creció, dejó las clases. Ahora lleva la representación para toda España de un gigante noruego de la energía renovable: REC, Renewable Energy Corporation. Su mujer, presente durante la entrevista, apunta: "Finn es muy bueno en las relaciones, es el mago de los contactos".

Pero un ser inquieto como Lie no podía conformarse con una sola actividad profesional, así que hace tres años se embarcó en otro proyecto junto a su mujer. "Como Jaione siempre ha trabajado en óptica, nos hicimos con la exclusiva de la distribución en España y Portugal de monturas de gafas Prodesign", comenta. Entre sus clientes, se encuentran María Escario, Javier Capitán, Olga Viza o Íñigo Lejarza.

Lie se encuentra plenamente asentado en Euskadi. "Me siento muy vasco y sufro cuando pierde el Athletic". Entre sus mayores alegrías recientemente cuenta la noticia de la tregua de ETA, por las "posibilidades que abre para el País Vasco, un lugar donde la gente es ingeniosa e inteligente, con posibilidades".