Portland completa la absorción de Lemona

La toma del control por Cementos Portland Valderrivas de la firma vasca Cementos Lemona está casi completada. Después de la OPA lanzada en diciembre pasado, la compañía integrada en el grupo FCC cuenta ya con el 97,44% de las acciones, según se constató en la última junta de accionistas de Lemona como empresa cotizada en la Bolsa. Portland consolida su posición en Estados Unidos, donde Cementos Lemona dispone de una planta en Maine para sus planes de crecimiento e internacionalización.

La cementera de FCC aplicará la experiencia de Lemona en políticas medioambientales, en las que los vascos trabajan desde 1995

La absorción pretende continuar la expansión de Portland Valderribas, que tiene sus miras en Estados Unidos y Suramérica

Portland Valderrivas pretende hacerse fuerte en el país norteamericano, donde la demanda de cemento es ahora superior a la oferta, lo que ha hecho que en momentos concretos no pueda atender todos los pedidos, según ha reconocido José Manuel Revuelta, director general adjunto. Sin embargo, los planes de extensión no pasan por los países emergentes, como China o India. "Tendrán que esperar", apunta Revuelta. La compañía apuesta por una política de primar el reforzamiento de los mercados en los que está en vez de entrar en operaciones de riesgo. Además de Estados Unidos, sus miras se dirigen a Suramérica.

La filial de FCC, que antes de la OPA era el primer accionista de Lemona con el 30,7% de los títulos, da prácticamente por culminada la absorción, que ha tenido un coste de casi 250 millones de euros. El precio por acción ha sido de 32 euros, el mismo que se fijó en la OPA de diciembre. El hasta ahora presidente de la firma vasca, José Domingo Ampuero, destacó, en la junta de accionistas celebrada el jueves en Bilbao, que el 97,44% de acciones captadas por Portland ratifican el apoyo de los accionistas de Lemona a la operación. Los vascos aceptaron la absorción, según explicó Ampuero ante sus accionistas, porque se garantiza la permanencia de la sede social en Bilbao, la continuidad de los activos y el equipo directivo, y el compromiso con el proyecto industrial de Cementos Lemona.

La junta sirvió para el cambio del consejo de la empresa vasca, copado ahora por los directivos de Portland. La presidencia ha pasado al máximo responsable de la cementera de FCC, José Ignacio Martínez-Ynzenga, y la entrada como consejeras de tres hijas de Esther Klopowitz (Esther, Alicia y Carmen Alcocer), y Fernando Falcó. En el consejo continúan Ampuero y Enrique Varela, procedentes de Cementos Lemona.

Resultados consolidados

Portland ha pasado a consolidar en sus resultados a Lemona desde el 1 de marzo y la empresa vasca ha aportado un activo de 301 millones de euros, con lo que el activo total de la filial de FCC es, a 31 de marzo de 2006, de 2.024,3 millones de euros, lo que supone un aumento de 537 millones frente al 31 de diciembre de 2005.

La adquisición de la compañía vasca se ha producido después de que el pasado año lograra los mejores resultados de su historia, con una facturación de 121,3 millones y un beneficio de 21 millones, un 40,1% más que en el ejercicio anterior. El primer trimestre de 2005 sigue aportando buenos datos para Lemona: 4,3 millones de plusvalías y un aumento de la cifra de negocio del 27%, que se ha elevado a 29,87 millones de euros. Portland se encuentra además con una compañía que, tras fuertes inversiones, acaba de modernizar sus plantas de Lemona y Maine, que el pasado año ya funcionaron a pleno rendimiento. Por ello, la firma vasca mantendrá este ejercicio sus inversiones en torno a los 16 millones de euros, una cifra similar a la de 2005.

El grupo vasco acaba de proporcionar a sus accionistas un dividendo de 49 céntimos de euro por título, que se pagará el 1 de junio, y se añade a los 17 céntimos abonados en enero. José Domingo Ampuero explicó a la junta que supone un incremento del 10% respecto al anterior ejercicio, con un pay-out del 35% sobre el beneficio consolidado y del 59% sobre el individual. El desembolso para el grupo ha ascendido a 7,39 millones. Unos datos que, según Ampuero, se han movido en las previsiones, "independientemente de la OPA" de Portland Valderribas.

"Cementos Lemona encaja perfectamente con sinergias tanto estratégicas como operativas", señala el director general de Portland Valderribas, quien destaca que su grupo esperó "el momento oportuno" para ejecutar la absorción. La plantilla de la compañía vasca ronda los 300 empleados, que se sumarán a los 2.640 trabajadores de la cementera del grupo FCC.

Políticas medioambientales

Portland Valderribas se beneficiará además de las políticas medioambientales de Lemona, que desde 1995 aplica métodos como la utilización de neumáticos fuera de uso como combustible para los hornos, a lo que luego se han añadido otros productos, como harinas cárnicas, plásticos o madera. Esta política ya ha permitido que Cementos Lemona no incumpliese el Protocolo de Kioto y finalizase 2005 con un excedente de derechos de emisión de un 2%.

La experiencia en este campo se extenderá al conjunto de Portland Valderribas. José Manuel Revuelta ha asegurado que ya se prepara un plan conjunto para todo el grupo sobre los derechos de emisión. El directivo de Portland señala que se mantendrá a los gestores de la empresa vasca. "Tenemos la máxima confianza en el actual equipo directivo de Lemona" , expresa.

La cementera de FCC ha tenido una facturación en el primer trimestre de 278,2 millones, un aumento del 38,9% respecto a los tres primeros meses de 2005, unos datos que se atribuyen a la fortaleza del mercado español y a la recuperación del de Estados Unidos. De ese 38,9% de crecimiento, un 8,5% corresponde a las adquisiciones de Lemona, Ceminter Madrid y Dragon Alfa. Con nueve plantas cementeras en funcionamiento (seis en España y tres en el extranjero), el 79,4% de las ventas está en nuestro país, un 19,3% en Estados Unidos y un 1,3% en el Reino Unido.

Las ventas del grupo de enero a marzo se han elevado a 2,7 millones de toneladas de cemento, que se unen a seis millones más de hormigón, áridos y mortero seco. El beneficio ha alcanzado los 80 millones de euros, cuando en el primer trimestre de 2005 se quedó en 21,1 millones.