El Festival de Cine donostiarra revisará al Lubitsch menos conocido

Se le conoce sobre todo por su maestría para poner en solfa al ser humano y la sociedad de su época con sarcasmo y elegancia, pero Ernst Lubitsch, director de Ser o no ser o Ninotchka, ya había dejado huella en el cine mudo antes de convertirse en el rey de la comedia. El 54º Festival de Cine de San Sebastián le rendirá homenaje entre el 21 y el 30 de septiembre próximos con una retrospectiva que rompe estereotipos e incide en toda su obra. El certamen dedicará también un ciclo a la emigración.

Los responsables del festival presentaron ayer la imagen y el contenido de las retrospectivas de la próxima edición. La primera estará dedicada a Lubitsch (Berlín, 1892; Los Ángeles, 1947), director discreto y guionista audaz "inspirador de carreras de maestros más recientes como Billy Wilder", dijo Mikel Olaciregui, responsable del certamen.

En San Sebastián podrán verse sus comedias más conocidas, como El bazar de las sorpresas (1940), pero también su drama antibelicista Remordimiento (1932) o buena parte de su legado en el cine mudo. "Conviene dar a conocer a las nuevas generaciones sus aportaciones para que sepan que la comedia empezó antes de Woody Allen y que el precursor de la denuncia política y social irónica fue un alemán que emigró a EEUU", recalcaron la organización de la muestra por boca de la actriz Aizpea Goenaga.

El certamen presenta cada año tres retrospectivas. Lo habitual es anunciarlas todas el mismo día, pero ayer se rompió la tradición, porque la organización no ha podido confirmar todavía la presencia en San Sebastián del principal candidato a una de ellas, "y es una condición indispensable", destacó Olaciregui.

Sí se hizo público en cambio que el ciclo temático estará dedicado a la emigración. "El cine ha dado cuenta" de distintos movimientos migratorios, de las "dificultades lingüísticas de los emigrantes, del contraste entre culturas o religiones, del rechazo de los nativos, de los brotes de racismo,..." afirma el festival. Emigrantes se detendrá a analizar todas esas problemáticas y muchas otras a través de una treintena de filmes, entre ellas Gaijin, caminos de libertad, de Tizuka Yamasaki; Espaldas mojadas, de Alejandro Galindo; América, América, de Elia Kazan, o In this world, de Michael Winterbottom.

La próxima edición del certamen, que mantiene su esquema habitual -Sección Oficial, Zabaltegui, Horizontes Latinos, Velódromo- estará presidida por un cartel que rinde homenaje al thriller. Lo protagoniza la actriz Marisa Paredes y recrea la famosa escena de la sala de los espejos del final de La dama de Shanghai, de Orson Welles, en la que Rita Hayworth empuña un revólver. La imagen, destacó Olaciregui, es el "último regalo" del cartelista Toni Galindo, fallecido la víspera.