Los médicos de El Ejido convocan dos nuevos días de huelga

Los facultativos del hospital de Poniente (El Ejido, Almería) han convocado para el 15 y 16 de mayo un nuevo paro. Los médicos, que ya hicieron otros dos y llevan casi dos meses sin hacer horas extras, aseguran que el convenio colectivo firmado por todos los sindicatos les perjudica "seriamente". Mientras tanto, más de 6.000 pacientes se han visto afectados por la suspensión de operaciones o han sido derivados a otros centros privados.

Entre las principales reivindicaciones del colectivo médico está el que no se les obligue a desplazamientos por toda Andalucía oriental o que la parte variable de sus sueldos se reduzca del 33% al 20%. Según las estimaciones realizadas por los facultativos, entre el 4 de abril -primer día de huelga convocado- y el día 20, tras la segunda jornada de paro, unas 2.200 personas fueron atendidas en las clínicas privadas de Almería Virgen del Mar y Mediterráneo para exploraciones radiológicas complejas. Unas 75 consultas de ginecología semanales son atendidas en la Clínica Mediterráneo y 15 en la Bola Azul, dependiente este último del hospital público de Torrecárdenas. Además, unas 200 intervenciones quirúrgicas y otras 200 consultas de preanestesia se atienden en la Clínica privada Mediterráneo.

El colapso en ginecología, anestesia y radiología es "absoluto" y en algunos servicios las plantillas están en niveles críticos, aseguran. "Vamos a llegar a la solución del conflicto. Y si eso supone más tiempo, pues será más tiempo. Nosotros tenemos paciencia y estamos esperando serenamente a que la situación se resuelva. No estamos dejando de hacer nada que sea estrictamente nuestra obligación. Hacemos nuestra guardia y acudimos religiosamente a nuestras consultas. Lo único que está dejando de hacerse es la actividad extraordinaria y así podemos seguir hasta el infinito", aseguró ayer María Dolores Sánchez, una de las portavoces de los médicos.

Tal y como se denunció semanas atrás [EL PAÍS, 27 de abril] la dirección del hospital continúa alojando a más de cuatro enfermos de diferente sexo en una sala de espera a modo de hospital de campaña. "Esta mañana, en la quinta planta, había cinco pacientes en una sala de espera separados por biombos y los pacientes se estaban quejando de que no podían dormir porque las luces están todo el día encendidas. Además han habilitado oxígeno continuo en algunas camas pero hay otras que tienen bombonas portátiles, lo que implica ponerle un busca al de mantenimiento, que éste conteste y que suba a reponerla", explicó Antonio Fernández, otro portavoz médico.