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Elecciones en Italia

Los resultados definitivos certifican una ventaja del centro-izquierda de 24.755 votos

La justicia rechaza un recurso del ministro que impulsó el cambio de la ley electoral

El Tribunal de Casación italiano, similar al Tribunal Supremo español, quiso disipar de una vez todas las dudas. Anunció que La Unión, de Romano Prodi, había ganado las elecciones en la Cámara de Diputados y rechazó un recurso presentado ayer por el ministro Roberto Calderoli, de la Liga Norte. La diferencia entre el centro-derecha y el centro-izquierda quedó en 24.755 votos, 469 menos de los 25.224 que establecían los resultados provisionales de Interior. Ese puñado de papeletas bastó para dar a Romano Prodi el "premio de mayoría" que le garantizará un cómodo dominio de la Cámara.

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El Senado es, sin embargo, otra cosa: con una mayoría de sólo dos escaños, uno en la práctica porque el presidente no vota, el nuevo Gobierno de centro-izquierda quedó condenado a cojear desde el primer día. Pero eso ya era sabido.

Nunca antes se había dado un resultado tan estrecho. Emitieron votos válidos para elegir a los miembros de la Cámara de los Diputados 38.153.343 italianos, de los que 37.980.441 correspondieron a candidaturas integradas en una de las dos grandes coaliciones. La Unión obtuvo 19.002.598 votos, frente a los 18.977.843 de la Casa de las Libertades, de Silvio Berlusconi.

El ex ministro de Reformas Roberto Calderoli (Liga Norte) acudió por la mañana al Tribunal de Casación para presentar un recurso contra la atribución a La Unión de los casi 50.000 votos de la lista Liga por la Autonomía-Alianza Lombarda-Liga de Pensionistas. Calderoli, dentista de profesión, fue quien dirigió la redacción de la ley electoral proporcional aprobada en el último suspiro de la legislatura, con el fin de impedir, o al menos dificultar, la anunciada victoria del centro-izquierda.

El propio Calderoli definió su ley como "una cerdada". La "cerdada" resultó autoinfligida, porque el tiro les salió por la culata a los berlusconianos: con el anterior sistema mayoritario habrían obtenido más escaños que el centro-izquierda.

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Calderoli alegó que "como redactor" conocía el texto mejor que nadie y que resultaba evidente que los votos de la pequeña lista lombarda no podían agregarse a ninguna coalición, por lo que vencía Silvio Berlusconi.

¿Cuál era el argumento legal de Calderoli? La ley establecía que los resultados obtenidos en cada circunscripción por una lista determinada debían sumarse a los votos de la misma lista en las demás circunscripciones del país antes de agregarse al cómputo global de la coalición. "La ley es clara: Alianza Lombarda no puede sumar sus votos porque sólo se presentó en Lombardía, y por tanto no cumple los requisitos legales para formar parte del cómputo global de La Unión", proclamó el ex ministro de la xenófoba Liga Norte.

La pintoresca tesis de Calderoli -quien alcanzó una cierta notoriedad cuando propuso hundir a cañonazos las pateras de inmigrantes clandestinos, y tuvo su momento de gloria el día en que apareció en televisión con una camiseta estampada con las viñetas danesas sobre Mahoma (Berlusconi le obligó a renunciar a sus competencias al día siguiente)- fue secamente rechazada por el Tribunal de Casación. La ley electoral, "no prevé entre los requisitos de admisibilidad de una lista y de su eventual conexión con una coalición, el de la presentación en una pluralidad de circunscripciones electorales", indicó el Tribunal en su sentencia. Por tanto, debía "considerarse consentido que una lista puede presentarse y pueda conectarse con una coalición aunque se presente en una sola circunscripción".

La peripecia de la Liga Lombarda, escindida de la Liga Norte, rizó el rizo ayer cuando su líder, Elidio de Paoli, antiguo marxista-leninista, comentó al Corriere della Sera que lamentaba haber firmado un pacto de coalición con la plataforma de Romano Prodi y que, bien pensado, le habría ido mejor ir con Silvio Berlusconi, "un auténtico líder". No disponía, sin embargo, de diputados potencialmente tránsfugas. Sólo contaba con los votos que decidieron la victoria del centro-izquierda, y esos no podía ya llevárselos a ninguna parte.

PUNTO FINAL DEL RECUENTO

-Nunca se había dado un resultado tan igualado y la mayoría en el Senado es sólo de dos escaños

-Las tesis mantenidas en el recurso fueron rechazadas secamente por el Tribunal de Casación

-El ministro Calderoli quiso excluir del cómputo de La Unión 50.000 votos de la Liga Lombarda

-El líder lombardo dice ahora que se equivocó al pactar con Prodi, pero no tiene ningún diputado

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