El FMI alerta sobre la grave situación de la economía

Romano Prodi no ha recibido aún el encargo de formar gobierno, pero ya todo son agobios. Por si no bastaban la incertidumbre de los resultados y la exigua ventaja obtenida, el Fondo Monetario Internacional añadió ayer un poco más de presión sobre Il Professore. "Espero que el nuevo Gobierno italiano", declaró en Washington el economista jefe del FMI, Raghuram Rajam, "comprenda la gravedad de la situación y ponga en práctica reformas macroeconómicas y estructurales, por ejemplo en el sector de los servicios financieros". Rajam declaró que Italia se enfrentaba a "desafíos tremendos", ya que su endeudamiento y su déficit presupuestario eran "muy elevados" y había sufrido "una pérdida de competitividad en los últimos años".

En sus previsiones macroeconómicas, el FMI redujo sus previsiones de crecimiento para Italia. Las previsiones de septiembre pasado daban a Italia una expansión del 1,4% del producto interior bruto en 2006. En el cuadro presentado ayer, el crecimiento se había reducido al 1,2%. También se redujeron del 1,7% al 1,4% las previsiones de crecimiento para 2007. En cuanto a la deuda nacional, el FMI la estimaba en un 107,6% del PIB a finales de este año.

"Mientras ciertos países europeos han hecho esfuerzos para respetar los compromisos derivados del Pacto de Estabilidad y Crecimiento (el acuerdo de disciplina presupuestaria agregado al tratado de creación de la unión monetaria), el déficit público ha registrado aumentos claros en Italia y Portugal", declaró el economista jefe del FMI. Rajam precisó, sin embargo, que la situación no era tan grave, al menos por el momento, como para forzar la salida de Italia de la unión monetaria. Algunos comentaristas económicos especularon en los últimos días con un posible abandono del euro por parte de Italia antes de 2015. "Son sólo especulaciones", indicó.