La Diputación de Valencia, condenada por la muerte de un obrero de Jaén aplastado por una roca en 2004

La Diputación de Valencia y las empresas Stachys, SA, y Pavasal, SA, han sido condenadas por el Juzgado de lo Social número 8 de Valencia por la falta de medidas de seguridad en una obra donde, el 1 de abril de 2004, se produjo un accidente laboral que costó la vida al peón Manuel Rodríguez Cifuentes, de 30 años y natural de Quesada (Jaén). La juez ha atendido la reclamación presentada por los dos hermanos del fallecido, que eran sus únicos herederos, y ordena que se les indemnice con 72.000 euros (36.000 a cada uno), un fallo contra el que cabe recurso. El accidente se produjo en unas obras de mejora en la carretera CV-560, entre Sumacàrcer y Navarrés, en el término de L'Alcúdia, que la Diputación adjudicó a Pavasal. El operario fallecido realizaba tareas de saneamiento en una ladera -obras que fueron subcontratadas a Stachys- cuando se produjo el deslizamiento y vuelco de una piedra de grandes dimensiones (de unos 15.000 kilos de peso) que le alcanzó y le causó la muerte por aplastamiento.

Inicialmente, el Juzgado de Alzira archivó el caso tras la resolución de la Inspección de Trabajo de Valencia exponiendo que el accidente fue fortuito y que no había falta de medidas de seguridad. Pero la familia del fallecido, asistida por el experto en seguridad laboral jiennense Francisco Delgado López, presentó reclamación por daños y perjuicios que fue admitida por el citado juzgado de Valencia.

La juez expone en la sentencia que "antes de iniciarse las obras, la ladera no fue examinada por el ingeniero de montes ni por el geólogo de la empresa Stachys", y solo lo hizo la tarde anterior el encargado de la constructora, "que carece de conocimientos técnicos". Y añade que las medidas de seguridad que se tomaron para evitar los deslizamientos fueron "absolutamente insuficientes", sobre todo "si se tiene en cuenta que el riesgo se había acentuado en gran medida como consecuencia de las lluvias caídas los días anteriores, que habían ido filtrándose y afectando al terreno adyacente a la roca". La Diputación de Valencia rechazó con anterioridad la reclamación presentada por los familiares de la víctima.