Rajoy aparca el ataque personal a Zapatero y le critica por la OPA

El debate en el Congreso sobre la última cumbre europea de Bruselas sirvió para que el líder de la oposición, Mariano Rajoy, fustigase con gran dureza al Gobierno por su actitud ante las OPA sobre Endesa, pero evitando el ataque personal al presidente, José Luis Rodríguez Zapatero. Rajoy anunció un recurso al Constitucional contra el decreto ley que amplía las competencias de la Comisión Nacional de la Energía (CNE). Zapatero sintetizó su postura afirmando que "la energía no circula libremente en Europa".

El líder popular anuncia recurso ante el Constitucional contra el decreto sobre la OPA

Más de cinco horas de debate sirvieron para que Rajoy saludase a los suyos tras una ovación cerrada, 24 horas después de entrevistarse con Zapatero en La Moncloa para tratar del alto el fuego de ETA. Se había mostrado tajante al tachar al Gobierno de intervencionista y de que, por primera vez, España "pone palos en las ruedas" de la construcción y la liberalización de Europa. Zapatero replicó que la energía es un sector estratégico, que muchos países europeos mantienen su capacidad de actuación en este sector porque "no circula libremente por Europa".

Hace tres meses, el 21 de diciembre, en el debate sobre la penúltima cumbre europea, Rajoy marcó un hito en el grado de agresividad personal hacia Zapatero. Le dispensó un trato de tono humillante y, después de decirle que su actuación en aquella cumbre había "rozado el ridículo", le espetó: "Debemos reconocer que ha hecho todo lo que está en su mano, todo lo que es capaz de hacer, todo lo que da de sí. No se le puede pedir más".

Ayer, a mucha distancia de lo anterior, se limitó a criticar la "relativa importancia del presidente del Gobierno" en las cumbres. Otro gesto en la línea de moderación podrá verse, según fuentes del entorno de Rajoy, en el hecho de que no preguntará al Gobierno en las próximas semanas por el terrorismo. Actuará, al menos próximamente, "como si estuviera vigente el pacto antiterrorista". Según las mismas fuentes, Rajoy tampoco hará causa insalvable para su apoyo al Gobierno en la búsqueda del fin definitivo de ETA que Zapatero no convoque inmediatamente la comisión de seguimiento de ese pacto. Su actitud será de esperar y ver.

No salió tan bien parado, en cuanto a las alusiones personales el ministro de Industria, José Montilla al que achacó tener "tics falangistas". El presidente del Gobierno salió en su defensa y replicó que "representando" al Grupo Popular la mención de Rajoy sonaba a "broma de mal gusto".

Zapatero, en su exposición inicial sobre la última cumbre europea, destacó que las líneas adoptadas sobre la futura política energética de la UE señalan expresamente que debe partirse de una "comprensión adecuada de las necesidades energéticas de los Estados miembros, así como de la conveniencia de configurar sus políticas energéticas teniendo presente el carácter estratégico del sector". Habló luego de la actitud de Europa al promover la igualdad de sexos (Zapatero y otros portavoces hablaron siempre de género) especialmente en el terreno laboral y se felicitó al destacar la coincidencia con la Ley de Igualdad que ha promovido el Gobierno español. También utilizó Zapatero las políticas de inmigración para recordar que España abandera en la UE las iniciativas que se vienen tomando y a las que se prestó atención en la cumbre.

Rajoy acusó a Zapatero de haber hecho cuestión personal de las OPA sobre Endesa y que, "por no verse derrotado en una batalla que nunca debió ser suya, pone en peligro los intereses de los consumidores que debían constituir su exclusiva preocupación en ese terreno". Luego se enredaron en una refriega con reproches muy concretos sobre las actitudes del Gobierno y del PP ante la OPA de Gas Natural sobre Endesa.

Alfredo Pérez Rubalcaba, portavoz del PSOE, terció en este punto y acusó a los Gobiernos del PP de haber actuado sobre las empresas públicas del sector energético "nombrando al presidente" de distintas compañías, luego "privatizándolas" y, por fin, "dejando al mismo presidente" nombrado por el Gobierno.

Zapatero aseguró que éste es "un Gobierno abierto, europeísta" y que "será mucho más abierto con las personas que con los capitales". Al acabar su primer intervención al inicio de la réplica Zapatero puso en el hemiciclo el alto el fuego anunciado por ETA el pasado día 22. Lo hizo recordando "la felicitación y el apoyo unánime recibido de todos los miembros del Consejo Europeo" y, luego, agradeciendo a todos los portavoces las menciones a esa felicitación europea.

La tarde concluyó con la acusación de Rajoy a Zapatero, en la sesión de cotrol al Gobierno, de "mentir en sede parlamentaria". Rajoy recriminó a Zapatero por consentir que el Estatuto de Cataluña "fije competencias exclusivas del Estado". Eso sería cambiar la Constitución a través de un Estatuto, replicó Zapatero. Recordó que el Tribunal Constitucional ya ha dicho que un Estatuto no modifica la ley fundamental. Con grandes aspavientos, Rajoy proclamó que Zapatero había "mentido" porque había afirmado que el Alto Tribunal ya ha proclamado la constitucionalidad. Zapatero sonrió y le emplazó a la próxima sesión de control para que se constaten sus palabras exactas.