Una caída de 12 puntos en la ocupación de Benidorm enciende las alarmas en el sector
La crisis del turismo británico y el descenso del mercado nacional lastran la temporada baja
Las luces de alarma se han encendido en el sector turístico valenciano. La ocupación hotelera en la primera quincena de marzo ha caído casi 12 puntos respecto a ese periodo de 2005 en Benidorm, y ya se confirma en toda la Costa Blanca que la presente temporada baja se cerrará en abril como una de las peores de los últimos años. El descenso de visitantes se aprecia igual de nítido en el aeropuerto de L'Altet, que en sólo dos meses ha perdido 30.000 pasajeros. El grueso de la caída corresponde al descenso de visitantes nacionales y británicos.
El aeropuerto de L'Altet ha perdido 30.000 pasajeros en los dos últimos meses
Los datos de la ocupación hotelera de Benidorm, uno de lo principales indicadores del sector turístico valenciano, caen en picado desde el inicio de año. Enero se cerró con una ocupación media del 61,6%, 8,7 puntos menos que el año anterior. En febrero, el descenso fue de 8,4 puntos. Pero la luz de alarma se ha encendido la primera quincena de marzo, con una caída de casi 12 puntos porcentuales en relación con esas mismas fechas de 2005.
La patronal hotelera Hosbec prevé que en la segunda quincena de marzo se recuperen al menos seis de los doce puntos perdidos durante los primeros quince días. Con todo, el sector ya ha hecho la cuenta de que la presente temporada baja es una de las peores de los últimos años.
Las crecientes alternativas de destinos muy baratos están haciendo mella en el sector, que no acaba de rematar con éxito el esfuerzo por desestacionalizar el turismo. Salvo Benidorm, que pese a los últimos datos negativos mantiene un gran nivel de ocupación fuera de la temporada, el resto de destinos valencianos no acaba de desestacionalizar su producto.
"Es cierto, alcanzamos menos ocupación", admite Pere Joan Devesa, presidente de Hosbec, pero "no debemos olvidar que bajamos respecto a unos resultados excelentes, con una media anual de un 80% de ocupación".
En marzo, la capacidad hotelera de Benidorm alcanzó el 64,1%. Más de la mitad de los turistas alojados esos días eran británicos. El Reino Unido es el principal emisor de turistas a la Costa Blanca en invierno, casi el 60% del total, y cualquier variación en ese mercado es crucial para el sector. Este invierno el mercado británico en la Costa Blanca está en crisis y prueba de ello, además del indicador de la ocupación hotelera, es el dato del aeropuerto de L'Altet: en dos meses se han perdido 30.000 pasajeros, cifra insólita en esta terminal que lleva más de una década batiendo sus registros. Con todo, según los datos aportados por Hosbec, el descenso con respecto al mes anterior se ha experimentado, sobre todo, en el turismo de procedencia española.
Los empresarios se muestran cautos y preocupados ante esta tendencia, aunque confían en recuperar mercado en primavera. De hecho las reservas apuntan a una recuperación en mayo. La Asociación Provincial de Hoteles de Alicante (APHA), que reúne a 73 hoteles de la provincia con una capacidad de 12.000 plazas, también ha empezado a notar ese descenso. En febrero de 2006 la ocupación media fue del 59% y este año ha descendido al 43,6%, 16 puntos menos. Sin embargo, en enero aumentó del 43% del año pasado al 49%, seis puntos de diferencia.
Tomás Mazón, profesor de Sociología del Turismo en la Universidad de Alicante, considera que el turismo residencial tiene "mucho que ver" con el descenso de la ocupación. De un estudio realizado entre un millar de turistas residentes, se extrae la conclusión de que el 74% de los que han comprado o alquilado una vivienda eran antes usuarios de hoteles. Es decir, primero vienen de visita y luego se afincan, "con lo que al final hay menos clientes para los hoteles". El 11% de los entrevistados vive en la Costa Blanca largas temporadas en alquiler, "con lo cual también sustraen cuota de mercado a los hoteles".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.