Los divorcios aumentan un 76% y las separaciones disminuyen un 32%

Más divorcios y menos separaciones. La reforma del Código Civil, que el pasado julio eliminó la necesidad de obtener la separación como paso previo para el divorcio, ha provocado un "importante" aumento de este último, según el Consejo General del Poder Judicial. En 2005 se presentaron 87.345 demandas de divorcio (59.908 en el segundo semestre), un 76,4% más que el año anterior. En cambio, las separaciones (52.074, de las que 13.016 se plantearon entre julio y diciembre) cayeron un 32,6%. Las demandas por ruptura crecieron un 9,8%.

La reforma para agilizar las rupturas matrimoniales, que permite acudir directamente al divorcio a los tres meses de la boda, ha provocado un "desplazamiento" hacia el divorcio de las demandas de separación (esta figura, en la que se mantiene el vínculo matrimonial, ha dejado de ser un paso obligatorio para la ruptura del vínculo). Así lo constata el informe que mide el impacto de la reforma en vigor desde julio de 2005.

El trabajo, difundido ayer, afirma que "los divorcios y separaciones, tanto consensuados como no consensuados, tras permanecer estables durante 2004 y los dos primeros trimestres de 2005, sufren el impacto de la modificación legal con un incremento de los divorcios acompañado de una reducción de las separaciones". Casi seis de cada diez de las demandas de divorcio presentadas el año pasado fueron por mutuo acuerdo, lo que convierte esta modalidad en la más habitual (antes lo era la separación consensuada). También en las separaciones predomina el pacto (en el 62,7% de los casos el año pasado).

"No me sorprenden estos datos", afirma la letrada Susana Moya, de la directiva de la Asociación Española de Abogados de Familia. "Tras la reforma, prácticamente todos los procesos de separación se transformaron en procesos de divorcio porque así lo solicitaron los interesados", prosigue. "Además, en las nuevas rupturas, los ciudadanos se han inclinado por pedir directamente al divorcio. Así tienen un solo proceso, lo que evita costes económicos y psicológicos. Las demandas de separación casi han desaparecido", concluye.