La ley antitabaco se incumple en el 85% de los locales de ocio

En el 85% de los locales de ocio (bares, restaurantes, salas, pubs...) de más de 100 metros los clientes no respetan los espacios sin humos, una cifra que llega al 95% en las discotecas, según una encuesta encargada por la federación de hosteleros a la que han respondido 1.000 empresarios. El sector del ocio nocturno apuntó ayer que espera una caída del 21% del volumen de negocio y pérdidas de 4.200 millones de euros anuales por la ley antitabaco.

Los locales de más de 100 metros cuadrados deben señalizar las zonas donde se puede fumar para diferenciarlas de los lugares en los que está prohibido. Y tienen tiempo hasta septiembre para separar físicamente el espacio con humos del libre de tabaco. Esto afecta a bares o restaurantes pero también a discotecas. Y es en las pistas de baile donde menos se respeta la señalización que prohíbe encenderse un cigarro, según una encuesta elaborada por la Federación Española de Hostelería y la Asociación Nacional de Empresarios por la Calidad del Ocio entre 1.000 establecimientos. Hasta en el 95% de las discotecas los clientes no respetan la ley, una cifra que se reduce al 85% en los medianos y grandes bares o restaurantes.

Éste es uno de los principales problemas de los que se lamentan los empresarios en relación con la ley antitabaco. Otras quejas que plantean están relacionadas con las formas de crear y aislar las zonas de fumadores (le preocupa a un 80%), la dificultad de medir el local (65%), así como de competir con los locales de menos de 100 metros cuadrados (el 50%), los únicos en los que se permite fumar.

A partir del fin del plazo de adaptación a la ley "en lugar de una mayor rotación de clientes por sus salidas a la calle, esperamos una reducción significativa de las estancias en los lugares de ocio y la radicalización del fenómeno del botellón", señaló ayer Vicente Pizcueta, responsable de comunicación de la Asociación Nacional de Empresarios por la Calidad del Ocio (Eco).

Pizcueta pintó un escenario oscuro para los empresarios de ocio nocturno y cifró las pérdidas que se esperan en 4.200 millones de euros anuales, una cantidad estimada a partir de la percepción del millar de empresarios consultados. A ello sumó los efectos de la retirada de publicidad de tabaco en estos locales, que ha supuesto que el sector dejara de percibir 150 millones de euros.

El estudio, elaborado con información de Madrid, Cataluña, la Comunidad Valenciana, La Rioja, Asturias y Andalucía, refleja que el 89% de los bares, restaurantes y locales de copas de menos de 100 metros cuadrados permiten fumar. Pizcueta destacó que, tomadas en conjunto, el 69% de las 346.000 empresas hosteleras (desde hoteles a bares) permiten fumar.

Después de dos meses de la entrada en vigor de la ley "aún no sabemos qué hay que hacer con claridad", se quejaba ayer el presidente de Eco, Dionisio Lara, que calificó la norma de "restrictiva, arbitraria e improvisada, y carente de progresividad y concreción". Además, abogó por que se permitan medidas alternativas a la separación física con tabiques de las zonas para fumadores, como barreras de aire o equipos de purificación ambiental.