El nuevo plan urbanístico de Las Rozas supone un aumento del 47% de la población

El municipio de Las Rozas, gobernado por el PP, aprobó ayer de forma inicial un nuevo plan general de ordenación urbana que elevará su población a 110.000 habitantes, el 47% más que la actual. La propuesta convierte 450 hectáreas en urbanizables, prevé un límite de 7.556 nuevas viviendas y agota el suelo edificable de la localidad. Los grupos municipales de la oposición (PSOE e IU) son contrarios a este desarrollo porque consideran que sólo favorece a las constructoras, masifica el municipio y deja de lado al medio ambiente y a los roceños.

"Espero que la Comunidad de Madrid dé el visto bueno al nuevo ordenamiento en el mes de julio", afirma el alcalde de Las Rozas, Bonifacio de Santiago (PP). Una vez que esto ocurra, el plan regulará el urbanismo del municipio durante los próximos 15 años. Pero antes de este paso definitivo, se abrirá un periodo de información pública durante 30 días, en el que los actuales vecinos (75.000 según el documento del plan) podrán presentar sus alegaciones.

El municipio, que tiene el 42% de su suelo protegido por los parques regionales de la Cuenca Alta del Manzanares y del Curso Medio del Guadarrama, podrá alcanzar un máximo de 39.556 viviendas. De éstas, 27.000 ya están construidas, 5.000 se hallan en construcción, y 7.556 proceden del nuevo plan urbanístico (la mitad gozará de algún tipo de protección).

Los núcleos residenciales previstos se desarrollarán en cuatro sectores que ocupan 343 hectáreas, situados a ambos márgenes de la M-505 (carretera de El Escorial), y pegados al parque regional del Curso Medio del Guadarrama: Fuente del Cura, La Retorna, La Cervera I y La Cervera II. De esta forma, la localidad destinará a uso urbanístico 3.381 hectáreas de las 5.883 hectáreas que forman el municipio (lo que supone el 58% del término municipal).

Declaración de impacto

El plan prevé dejar 124,54 hectáreas de suelo urbanizable no sectorizado (terreno a desarrollar en el futuro) en la zona colindante con El Abajón y la M-50. El Ayuntamiento intentó declarar también esa área como urbanizable sectorizada (para edificar de forma inmediata), pero el Gobierno regional lo descartó debido a que existe una zona de gramíneas que peligraría con la construcción. Para proceder en el futuro a la urbanización de esta zona será necesario realizar previamente una declaración de impacto medioambiental.

El portavoz del PSOE en Las Rozas, Ramón Moreda, mantiene que en dicha zona se podrían edificar otras 1.900 viviendas aparte de las que ya contempla el nuevo plan. "Esto supone un crecimiento que no se detalla, lo que elevaría la población del municipio a 130.000 habitantes en 10 años". Sin embargo, el alcalde, Bonifacio de Santiago, asegura que en dichos terrenos el Ayuntamiento no tiene previsto levantar tantos pisos. "Haremos un centro de I+D (investigación y desarrollo) similar al que ya está haciendo Majadahonda en los terrenos limítrofes", indica.

El regidor recuerda que lo único que han hecho con dicho entorno es seguir las directrices marcadas por la Comunidad de Madrid. "No sabíamos que era una zona de gramíneas. Aun así, lo considero incongruente, ya que Majadahonda está construyendo al lado. Le debería afectar igual que a nosotros", dice.

Moreda se pregunta para qué sirve tanto ladrillo privado. "Lo que necesitamos son infraestructuras, no más viviendas. Porque seguimos con el mismo número de centros de salud que en 1995, no hay ningún centro de día, hay barrios y urbanizaciones completamente abandonados, y tenemos problemas con el transporte público, entre otras carencias".

El plan de ordenamiento urbanístico deja una zona de reserva para el futuro trazado de un tren ligero. "Pretendemos que una puntos de la población con el tren de cercanías. Pero eso llegará más tarde, la próxima legislatura. De momento, se está construyendo en Pozuelo y Boadilla. Después le toca a Majadahonda y a Las Rozas", según el alcalde.

Las Rozas está unido con Madrid por la autopista A-6 y la M-50. Otro eje importante es la carretera de El Escorial M-505. Estos viales soportan un tráfico muy denso, que cada día se intensifica por el desarrollo de los municipios limítrofes.