La oposición ugandesa denuncia una manipulación de las elecciones
Con los 20.000 colegios electorales aún abiertos -ante los cuales se acumularon largas colas de ugandeses deseosos de votar en las primeras elecciones multipartidistas en 20 años-, el partido de Kizza Besigye, principal opositor al presidente Ioweri Museveni, denunció a mediodía de ayer la existencia "múltiples irregularidades".
"La votación va muy mal". "El Gobierno no quiere elecciones libres y justas", decía el comunicado del grupo opositor. Entre las irregularidades cita la desaparición de miles de votantes del censo y el empleo, por parte de los seguidores de Museveni, de "una tinta que se evapora en un par de segundos y permite volver a votar".
Desde el partido del presidente, que lleva en el poder desde 1986 cuando entró en Kampala como jefe guerrillero, acusan a los seguidores de Besigye de provocación. "Son unos malos perdedores", dijo Ofuono Opondo, portavoz del Movimiento de Resistencia Nacional (MRN). "Hay que diferenciar los problemas técnicos de los políticos. Mi hermano tampoco ha podido votar y es seguidor del presidente", añadió como explicación.
Museveni acudió a un colegio electoral en Rushere, aldea del oeste de Uganda donde posee una granja. "Obviamente, ganaré", dijo a los periodistas tras guardar su turno. Su principal rival, Kizza Besigye, votó en Rukungiri, también en el oeste del país. "Hay demasiados problemas en demasiados sitios", afirmó. En la capital, sus seguidores se apresuraron a bailar y cantar delante de tres colegios en los se había declarado vencedor a su candidato.
Grupos de derechos humanos consideran que el monopolio político del MRN y la detención de Besigye a su regresó al país a finales de 2005 (que desde entonces ha intercalado los mítines con las citas en los tribunales) han creado unas condiciones de desigualdad.
Museveni, ensalzado hace años por los países donantes como líder ejemplar (la economía de Uganda lleva creciendo un 6% anual desde 1986) ha perdido casi todo el crédito en los últimos años, sobre todos desde su implicación en la cruenta guerra de Congo, que en 10 años ha causado la muerte de más de 3,5 millones de personas.
El odio que se profesan desde hace seis años Museveni y Besigye, ex amigo y ex médico personal, se extiende a sus mujeres, ambas en liza electoral. Janet Museveni, de 57 años, aspira a lograr un escaño y Winnie Byanyima ha tenido protagonismo en la campaña de su marido Besigye. Se da la coincidencia de que Byanyima fue además la compañera sentimental de Museveni en los años de guerrilla.
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