Otra crisis con factura falsa

La polémica de las facturas falsas que sacudió al Ayuntamiento de Sevilla a principios del año pasado ha tenido un coletazo inesperado que ahora afecta a la Diputación. El origen está en tres facturas presentadas por la Federación de Asociaciones de Vecinos Unidad, una organización próxima al PSOE, para justificar unas subvenciones del Ayuntamiento y de la Diputación, ambas en manos de los socialistas. De momento, esta nueva crisis se ha cobrado la dimisión de Ángel Cervera como asesor del presidente de la Diputación, Fernando Rodríguez Villalobos, y de su mujer, Ángeles Nevado, como presidenta de la asociación vecinal. Nevado trabaja además en la sociedad Sevilla Siglo XXI, dependiente de la Diputación.

Un asesor cesa en la Diputación un año después de dejar el Ayuntamiento por un caso similar

Cervera dejó su puesto de asesor el pasado 10 de febrero, un día después de que El Correo de Andalucía desvelase que la federación había justificado dos subvenciones de la Diputación con facturas de la empresa de Cervera (un quiosco familiar). El ex asesor de la Diputación, hermano del portavoz de la Junta, Enrique Cervera, ya se vio implicado en una polémica similar hace poco más de un año. En enero de 2005, Cervera dimitió como coordinador del grupo municipal del PSOE en el Ayuntamiento de Sevilla tras conocerse que, a través de su empresa, había facturado al Consistorio un trabajo de cartelería en el distrito Macarena.

Las facturas que están en el ojo del huracán no son muy elevadas, pero, al llover sobre mojado, han dado alas a PP y PA para exigir la dimisión del alcalde de la capital, Alfredo Sánchez Monteseirín, y del presidente de la Diputación, Fernando Rodríguez Villalobos. Los gobiernos de ambas instituciones están intentando quitar hierro al asunto, que atribuyen a un error, y claman contra las gruesas acusaciones de la oposición. La Diputación ha anunciado una auditoría a Unidad y nuevas medidas de control.

El grupo socialista en la Diputación asegura que Rodríguez Villalobos fichó a Cervera como asesor tras su salida del Ayuntamiento porque, pese a las críticas, había salido indemne de la crisis de las facturas falsas en el distrito Macarena. Ahora, el presidente de la Diputación, tras declararse "decepcionadoy engañado", asegura que ahora "evidentemente" no volvería a contratar a Cervera.

La factura entregada por la asociación al Ayuntamiento asciende a 2.602 euros, mientras que las dos presentadas en la Diputación son de 1.172 y 1.415 euros, respectivamente. Estas ayudas fueron concedidas a la asociación de vecinos para ejecutar determinados programas, pero, a la postre, fueron utilizados para gasto corriente, lo que es irregular. Las relaciones de la asociación con el Ayuntamiento y la Diputación son ahora observadas con lupa, pese a que ya ha reintegrado estas cantidades en ambas administraciones. El PP sostiene que Unidad ha recibido en total más de un millón de euros de la Diputación y del Ayuntamiento en subvenciones en los últimos seis años.

Desde el PSOE se destaca que fue la propia asociación la que descubrió las anomalías a raíz de una petición de información del interventor municipal y sospecha que tras lo ocurrido hay "una estrategia de acoso". "Porque alguien cometa un desliz, no se nos puede meter a todos en el mismo saco", ha afirmado Antonio Guisado, portavoz de la asociación desde la dimisión de Ángeles Nevado.