La Agencia de Calidad evalúa a 12.000 aspirantes a profesor universitario

En algo menos de tres años, más de 12.000 licenciados han sometido sus méritos profesionales y académicos a la evaluación de un tribunal universitario para optar a un contrato en la universidad como ayudante doctor, colaborador o contratado doctor, las tres figuras para las que se necesita esta acreditación previa. Así lo estableció la Ley Orgánica de Universidades que aprobó el Gobierno del PP y que ahora se está modificando en parte. El 62% del total de solicitudes presentadas por los aspirantes entre diciembre de 2002 y junio de 2005 consiguió un aprobado. El 87% de los solicitantes ya eran becarios o profesores asociados a tiempo parcial en la universidad que querían mejorar o consolidar sus puestos.

Las comunidades autónomas pueden contratar a profesores e investigadores para las universidades. Hay diversos tipos de contratos, pero para acceder a tres de ellos el aspirante necesita una evaluación positiva. Es el caso para el profesor ayudante doctor, profesor colaborador y profesor contratado doctor. La Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (Aneca), que preside Francisco Marcellán, es el organismo que organiza estas evaluaciones. El 57% de los solicitantes aspiraban a un solo tipo de contrato; el 26%, a dos; el 12%, a tres y un 5% solicitó evaluación para los cuatro contratos (el cuarto es para profesor de universidad privada). En total se presentaron 20.552 solicitudes de evaluación.

Los tribunales están compuestos por un presidente, un secretario y ocho o diez expertos universitarios con experiencia evaluadora y académica. Del total de solicitudes evaluadas, el grueso corresponde a las Ciencias Sociales y Jurídicas (el 27%) seguidas de las Experimentales (un 24%) y las Técnicas (el 21%); Humanidades, con el 16% y Ciencias de la Salud (el 12%) son las últimas en esta lista.

Las solicitudes para profesor ayudante doctor siempre se mantienen por encima del 75% de aprobados. El resto oscila entre el 45% y el 65% de evaluaciones positivas.

Con el cambio de Gobierno, los nuevos responsables de la Agencia de Evaluación han modificado en parte estas revisiones. Ahora se mide también la docencia, no sólo la investigación desarrollada por el aspirante. Otro cambio es que ahora los que aspiran a seguir en la universidad una vez concluidos los estudios "tienen unas reglas claras para seguir". "Saben qué tienen que hacer desde que acaban la tesis doctoral hasta que acceden al puesto elegido", explica

Eduardo Coba, responsable de este informe elaborado por la Aneca.

"Esto antes no existía y se solía preguntar a los profesores, era un proceso más errático. Se ha definido la carrera del profesor contratado. Así no van a ciegas, tienen unos criterios que, además son nacionales", añade.