Gobierno y Generalitat aparcan diferencias para coordinar obras hidráulicas en un programa conjunto

El Gobierno y la Generalitat dieron ayer un paso más en la concreción de un programa conjunto de actuaciones hidráulicas para afrontar la sequía y garantizar nuevos aportes de agua con una reunión que permitió avanzar en los proyectos para reforzar el abastecimiento a las ciudades de Valencia y Alicante, y sus áreas metropolitanas. La idea inicial de firmar un convenio como el suscrito por el Ministerio de Medio Ambiente con el Gobierno de Murcia, se difumina en favor de una lista conjunta de obras de competencia de las dos administraciones. "Lo que importa es que la coordinación sea un hecho", indicó en un receso de la reunión el director general de Acuamed, Adrián Baltanás, quien tiene previsto celebrar esta semana encuentros con entidades bancarias en Valencia, Murcia y Almería para la financiación de obras del programa Agua.

Expertos en aguas subterráneas exigen más control para evitar la sobreexplotación

El consejero de Infraestructuras, José Ramón García Antón, advirtió que la Generalitat "no admitirá que se la soslaye" o se realicen actuaciones con las que no esté de acuerdo, al tiempo que destacó su acuerdo con muchas obras de depuración y reutilización previstas en el programa Agua y el Plan Hidrológico Nacional. Por su parte, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), Juan José Moragues, afirmó que las reuniones entre el Gobierno y la Generalitat tienen "como objetivo claro acelerar las actuaciones".

García Antón recordó que las obras hidráulicas en la cuenca del Júcar y del Turia permitirán ganar en torno a 200 hectómetros cúbicos para Valencia y su área metropolitana, en el horizonte de 2007. El consejero mencionó la ampliación o finalización de seis depuradoras -incluida una nueva en el Palmaret-, y los avances en la reutilización del agua de la instalación de Pinedo para abastecer a la Acequia Real del Júcar y el Canal Júcar-Turia, entre otros proyectos. En el caso del área metropolitana de Alicante y Elche, se reforzará el abastecimiento con el desvío a la agricultura de agua depurada -con tratamiento terciario y desalación- en varias poblaciones. También se prevén actuaciones en el Vinalopó, añadió Baltanás.

La gestión del agua, en este caso subterránea, centró la presentación en Alicante de un simposio internacional que arranca hoy. Catedráticos y representantes gubernamentales expertos en aguas subterráneas reclamaron una nueva regulación administrativa y mayor inversión en investigación para atajar la sobreexplotación de los recursos acuíferos, que representan el 95% de las reservas hídricas del planeta. El encuentro, organizado por la Real Academia Española de Ciencias y el Instituto Nacional Geológico y Minero de España, reúne a especialistas en aguas subterráneas de 25 países.

En la presentación de las jornadas a los medios de comunicación, Ramón Llamas, presidente de la Sección de Ciencias Naturales de la Real Academia de Ciencias, denunció el uso intensivo de los acuíferos. "Estamos ante un problema importante, ante el que los políticos deben tomar conciencia, pues los agricultores van a seguir perforando pozos, con o sin permiso", precisó. El académico también descartó que el problema del agua sea "un elemento disuasorio para el urbanismo mal hecho". "Gracias al desarrollo científico, la escasez de recursos hídricos para el turismo y el urbanismo es un problema obsoleto, porque el agua, hoy en día, se fábrica con agua del mar", explicó. Los organizadores del simposio explicaron también que en la Comunidad Valenciana, el 51% de los 2.960 hectómetros cúbicos de agua que se consumen anualmente son de acuíferos subterráneos, 30 puntos por encima de la media española.