El Artium se abre a un paseo fotográfico por Arco

El Artium recibió ayer una cesión especial: casi 400 fotografías que recorren los últimos 15 años de la feria de arte Arco. Más de 70 fotógrafos, seleccionados por la organización del evento, se han dedicado a recrear desde su óptica la cita anual de Madrid. Este fondo fotográfico, catalogado por un equipo de la UPV, completará durante los próximos dos años la colección permanente del museo, en exposiciones propias y cesiones a otros centros.

El origen de la idea hay que rastrearlo en la pasión de Rosina Gómez-Baeza, directora de Arco hasta este año, por la fotografía como actividad creativa y por el enfoque que la agencia Magnum, fundada por Robert Capa en 1947, dio al oficio de fotógrafo. Magnum dignificó el fotoperiodismo y le ofreció una consideración de la que carecía hasta entonces. La agencia, además, se introdujo en los rodajes cinematográficos para dar constancia de la actividad detrás de los focos.

A partir de estas ideas, Gómez-Baeza impulsó, con la Asociación de Amigos de ARCO, los Recorridos fotográficos, un intento de apoyar la fotografía desde la propia feria de arte. Se delegó en un comisario -en la actualidad, Rafael Doctor director del MUSAC de León-, que seleccionaba un elenco de profesionales, con presencia de autores de los países invitados en la feria. La colección incluye obras de Alberto García-Alix, Gabriele Basilico, Gabriel Cualladó o Humberto Rivas.

Cada uno elegía el momento y el lugar que deseaba capturar: podían ser personajes que se movían por el recinto ferial, como hace el norteamericano Bruce Gilden, cuyo flash ha dejado para la posteridad una inquietante imagen de Mario Conde, entre otros visitantes por los pasillos de Arco. También se retratan las propias infraestructuras del recinto ferial madrileño, la opción que eligió el amante de las arquitecturas Basilico, quien optó por fotografiar los edificios del IFEMA.

Ya en los últimos años, se decidió invitar a artistas de otras disciplinas para que ofrecieran sus aportaciones. Y aquí empiezan a compartir terreno el costumbrismo de Cristina García Rodero o los retratos de García-Alix con las recreaciones realizadas por Ana Laura Aláez o Txomin Badiola, por citar dos creadores vascos incluidos en esta selección, lo que ha supuesto la apertura de la colección más allá de la fotografía a la mirada artística contemporánea.