Fuego y exorcismos

¿Qué le está quitando la ley antitabaco a la televisión? José Luis Garci se ha ido con sus humos a otra parte. Se ha ido con su cine histórico lleno de fumadores envueltos en volutas misteriosas y sensuales. Jesús Quintero ha tenido que bajar de su nube de humo y adoptar otras poses, otra forma de expresarse. Buenafuente (Antena 3) hizo el miércoles una parodia de la entrevista del Loco de la colina a Rocío Jurado el día anterior (TVE-1). Se llenó la boca de chicles y la cara de parches de nicotina. Todos los canales le están dedicando mucho espacio al tema.

1 Equipo (Cuatro) centró uno de sus reportajes en los negocios del tabaco, y pudimos ver a Marisa (Mariví Bilbao), la fumadora empedernida de Aquí no hay quien viva (Antena 3), atada de pies y manos a su cama para pasar el mono. Se revolvía y gritaba como una endemoniada, trajeron un cura exorcista que no tuvo éxito. [Eso me recuerda a otro personaje fogoso que es noticia desde la cama. Dijeron en el Telediario (TVE-1) que, para que vuelva a la consciencia, a Sharon le hacen escuchar música de Mozart y ruido de combates, ¡para que recuerde su pasado bélico! Como en La naranja mecánica. ¿Qué conseguirán, recuperar al viejo guerrero o exorcizarlo?].

Volviendo a Mariví Bilbao, ayer la actriz contó a María Teresa Campos (Antena 3) que también ha dejado de fumar en la vida real, después de 60 años.

Otro de los actores de Aquí no hay... se pasó la noche del miércoles por un plató, el de Noche Hache (Cuatro). Fernando Tejero (Emilio) sí echa humo. Según él, el vecindario de la serie sería insoportable en la vida real. "Ese edificio es como para meterle fuego y que arda como una falla". Y todo eso sin ánimo de criticar. Tampoco quiso mostrarse muy crítico monseñor Blázquez en la entrevista que le hizo Iñaki Gabilondo (Cuatro). No quería echar leña al fuego, pero dio algunas respuestas raras, como lo de la "ideología homosexual". En la serie de los vecinos se oyó pocos minutos después: "Es que tú reflexionas desde el lesbianismo". ¿Será eso? Habrá que esperar a ver L. Y que no las exorcicen.