"Una institución como Guantánamo ni puede ni debe existir"

La canciller Angela Merkel, que llegó anoche a Washington en su primera visita oficial a EE UU y se entrevista hoy con el presidente Bush, habla sobre su política exterior, en particular de sus relaciones con EE UU, Rusia y la UE.

Pregunta. ¿Abordará el tema de la tortura cuando se entreviste con George W. Bush?

Respuesta. Aliados como EE UU y Alemania siempre tienen que hablar sobre todas las cuestiones, incluso sobre cuestiones como éstas. Encuentro muy reconfortante que no sea sólo Alemania el país en el que tiene lugar un debate sobre los métodos legítimos en los interrogatorios, sino que lo mismo ocurra en EE UU. Y todavía me reconforta más que el presidente y el Congreso hayan llegado a una posición común. Es ésta una transformación del debate social en EE UU que me congratula mucho.

"Me parece positivo que, al final, Europa retuviera la idea de un tratado constitucional"

P. El Gobierno de EE UU considera legítimo sumergir en agua a los detenidos hasta que piensan que van a morir ahogados. ¿A usted eso le parece aceptable?

R. En Alemania tuvimos un debate parecido en relación con el secuestro del hijo de Metzler. Entonces lo que estaba en cuestión era si se podía amenazar con la tortura, o aplicar la tortura, para salvar la vida de un niño. El debate social mostró que para una abrumadora mayoría de los ciudadanos ni siquiera entonces el fin justificaba los medios. Ésa es también mi posición.

P. ¿Comparte usted la opinión de su ministro del Interior, Wolfgang Schäuble, de que en la lucha contra el terror también se deben utilizar informaciones que posiblemente hayan sido obtenidas por medio de la tortura?

R. No en el procedimiento penal. Esas confesiones obtenidas en dudosas circunstancias no pueden tener lugar alguno en un procedimiento judicial. Pero para defendernos de una amenaza debemos tener en cuenta todo aquello de lo que se disponga. ¿Qué haría usted si los servicios secretos de terceros países le transmitieran informaciones sobre cuyo origen existieran dudas? ¿Ignorarlas, sin más? Eso no puede ser. Tenemos la obligación de garantizar la seguridad de nuestros ciudadanos y ciudadanas.

P. Y con el objetivo de defendernos frente a las amenazas, ¿pueden también ser enviados funcionarios alemanes al campo de Guantánamo a interrogar a los prisioneros?

R. A la larga, una institución como Guantánamo ni puede ni debe existir en su forma actual. Es preciso encontrar medios y vías para dar un tratamiento distinto a los prisioneros. Para mí eso es algo que está fuera de toda duda.

P. ¿Hablará también de Guantánamo con el presidente Bush?

R. Indudablemente, hablaremos de toda la cuestión de la lucha contra el terrorismo. Pero lo que a mí me importa, y también lo dejaré claro en mi visita, es que nuestra relación con EE UU no se reduzca a las cuestiones de la lucha contra el terrorismo y la guerra de Irak. Las relaciones entre Alemania y EE UU han sido tan buenas durante tantos años porque eran algo que afectaba profundamente a la vida normal de las personas.

P. Antes, su partido hablaba sobre todo de la amistad entre Alemania y Estados Unidos. Ahora sólo se habla de relaciones. ¿Un enfriamiento consciente?

R. No tengo ninguna dificultad en decir "amistad": ¡la amistad entre Alemania y Estados Unidos! ¿Mejor así? No se trata de las palabras que se elijan. Quiero volver a mejorar la calidad y la esencia de la relación entre Alemania y EE UU.

P. ¿La palabra para describir las relaciones entre Rusia y Alemania es también "amistad"?

R. El concepto de alianza estratégica sería más exacto. Creo que con Rusia todavía no compartimos tantos valores como con Estados Unidos.

P. ¿Es Vladímir Putin para usted un "demócrata sin tacha", como afirmó su predecesor en el cargo?

R. Deseo que Rusia tome una vía de evolución lo más democrática posible. En cualquier caso, al juzgar a Rusia tenemos que tener en cuenta de dónde viene el país. No podemos trasladar de forma esquemática nuestras ideas sobre la democracia. Sin embargo, admito que hay líneas de desarrollo que nos preocupan, como por ejemplo las nuevas leyes contra las organizaciones no gubernamentales.

P. En su conflicto con Ucrania, Putin ha utilizado el gas ruso como arma política. ¿Cómo debería reaccionar Occidente?

R. Creo que estos días hemos llegado a ser muy conscientes de hasta qué punto es política una cuestión en realidad económica, es decir, la venta y distribución de gas.

P. ¿Qué conclusión política extrae de los acontecimientos?

R. En primer lugar, necesitamos unas relaciones buenas y estables con Rusia. En segundo lugar, debemos hacer cuanto sea posible para ahorrar energía y para diversificar las fuentes de abastecimiento de energía. No podemos ponernos en situación de dependencia.

P. ¿Significa eso que quiere prescindir del gas ruso?

R. Dependeremos del gas ruso de forma duradera. Pero no exclusivamente ni en exceso. Necesitamos tener una idea clara de dónde sacaremos nuestra energía en los próximos decenios.

P. ¿Es ésta una cuestión que es mejor tratar desde una perspectiva europea?

R. La UE también tendrá que ocuparse de este tema. Es un asunto de una enorme trascendencia económica y político-estratégica.

P. Su primera intervención como canciller en el escenario de la UE, en el Consejo Europeo de Bruselas, se ha considerado internacionalmente como un éxito. Sin embargo, el compromiso en cuya negociación ha participado usted les va a salir caro a los alemanes. Los pagos netos aumentarán en 2.000 millones de euros anuales. ¿Era éste el precio que calculaba Angela Merkel, la europea ejemplar?

R. El acuerdo de diciembre de 2005 es un buen resultado para Europa y para Alemania. Europa ha demostrado su capacidad de negociación y puede dedicar ahora toda su energía a la tarea de mejorar su competitividad. Alemania paga incluso menos de lo que se preveía en el acuerdo alcanzado en junio de 2005 con Jean-Claude Juncker. A partir de 2007, las aportaciones netas de Alemania quedarán claramente por debajo del objetivo que nos habíamos propuesto, el 1% del PIB anual alemán. Alemania, al igual que el resto de los contribuyentes netos, también aportará solidariamente su contribución a la Unión ampliada, por lo que las devoluciones en concepto de fondos estructurales serán inferiores que en el periodo financiero precedente. Sería ingenuo creer que con diez nuevos Estados miembros del este y del centro de Europa íbamos a pagar menos y a recibir más.

P. ¿Cómo valora las posibilidades de éxito de la Constitución Europea, que ha fracasado en varios referendos celebrados el año pasado?

R. No es factible que entren en vigor ciertas partes de esa Constitución, a la vez que se prescinde de otras, sin saber adónde se quiere llegar. El balance global resultó por eso sensiblemente perjudicado. Por tal razón, tenemos que reabrir un debate general. A mí me parece positivo que al final Europa retuviera la idea de un tratado constitucional. Yo apostaría por eso.