Maragall anuncia que más de 300.000 niños recibirán este año ayudas gubernamentales

Si 2004 fue el año del cambio y 2005 el de las respuestas, 2006 será el de los hechos, afirmó el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall. En un acto organizado por el Colegio de Periodistas de Cataluña de Lleida, Maragall pasó revista a la obra realizada y anunció que las políticas sociales serán uno de los objetivos del tripartito para este año. Para ilustrar esta afirmación, avanzó un dato: durante 2006, un total de 325.387 niños y sus familias serán perceptores de alguna de las ayudas previstas por la Administración catalana en el apartado de bienestar y familia.

El presidente catalán señaló que año tras año se han incrementado el número y la cuantía de las ayudas a las familias con niños de hasta tres años, y que se han ampliado a los de entre tres y seis años para familias monoparentales y numerosas, que, a su juicio, son las que tienen un mayor riesgo de sufrir pobreza. Estas ayudas pasarán a ser de 700 euros, lo que significa un aumento del 7%. Maragall hizo estas declaraciones durante una conferencia que pronunció anoche en el Instituto Municipal de Acción Cultural de Lleida, coincidiendo con una visita de tres días a municipios de la comarca.

Otro ejemplo de lo que quiere hacer el tripartito en políticas sociales son las pensiones de viudedad más bajas, que desde enero de 2004 se han revalorizado el 44 %. Maragall anunció que su Gobierno tiene listos dos proyectos de ley para reforzar estos objetivos en materia social. El primero es un proyecto de ley de prestaciones, que además de asegurar un nivel de ingresos a las personas con rentas más bajas, servirá para romper el círculo de la pobreza y garantizar una igualdad de oportunidades efectiva.

La segunda medida vendrá determinada por la ley de servicios sociales. Según Maragall, esta ley será el cuarto pilar del Estado de bienestar porque permitirá completar la acción de las ayudas económicas directas a las personas con riesgo de exclusión social, con servicios residenciales y domiciliarios universales. "Será un paso importante para garantizar la atención a las personas dependientes", añadió.

Maragall subrayó que el objetivo es hacer de Cataluña una "nación socialmente avanzada", garantizando mejores niveles de seguridad ciudadana y de justicia, mejorando la calidad de los servicios como la salud y la educación, mediante la universalización de los servicios sociales y de atención a las personas dependientes y mejorando la equidad y la eficiencia del sistema de bienestar.

Durante 2006 se ampliará la plantilla de los Mossos en 1.727 agentes; se abrirán cuatro nuevas prisiones; se construirán 95 escuelas, 60 centros de asistencia primaria y 5 hospitales, y la plantilla del profesorado aumentará en 6.000 plazas.

El presidente resumió las, en su opinión, principales aportaciones de su Gobierno: transparencia, con la creación de la Oficina Antifraude, y un ahorro que ha permitido reducir el déficit a la mitad, y planificación, con un plan de infraestructuras que integra la red viaria y la ferroviaria, un plan de la energía y un plan de inmigración.