Los secuestros de extranjeros se multiplican en Yemen

Los secuestros de extranjeros se han multiplicado en los últimos días en Yemen, donde cinco turistas italianos seguían retenidos anoche, al día siguiente de la liberación de un ex diplomático alemán y de su familia. Los italianos fueron secuestrados ayer en la región de Marib, unos 170 kilómetros al este de la capital. Tres mujeres fueron liberadas, pero decidieron volver con sus captores hasta que todo el grupo estuviese en libertad.

Los secuestradores son miembros de una tribu y reclaman al Gobierno yemení que libere a ocho de sus miembros que se encuentran encarcelados acusados de participar en un asesinato. El ministerio italiano de Asuntos Exteriores confirmó anoche el secuestro, aunque no precisó las circunstancias en las que se produjo. Un responsable de las autoridades locales en Marib aseguró que el Gobierno yemení había comenzado a negociar con varios líderes tribales para conseguir la liberación de los turistas italianos.

Como ha ocurrido ya varias veces en el pasado, el objetivo de este tipo de secuestros por parte de tribus de Yemen es presionar a las autoridades. Una fuente tribal ha indicado que los secuestradores pertenecen a la tribu de los Zayidi.

"Los raptores exigen la liberación de ocho miembros de su tribu que fueron extraditados recientemente desde los Emiratos Árabes Unidos", afirmó la fuente, que pertenece dicha tribu. "Fueron detenidos después del asesinato de un miembro de la tribu de los Al Qeiri, en diciembre de 2004, después de una disputa en torno a la venta de un coche", agregó la fuente, que insistió en que todos los encarcelados se consideran inocentes.

En un comunicado, el Ministerio de Exteriores italiano recordó que, desde hace tiempo, ha recomendado a los turistas italianos que no viajen a las zonas tribales de este país ante el peligro de que se produzcan secuestros, relativamente frecuentes sobre todo en la provincia de Marib, donde acuden los extranjeros principalmente a visitar los vestigios del reino de Saba. En noviembre, dos turistas suizos fueron secuestrados durante dos días, y el pasado diciembre sucedió lo mismo con dos turistas austriacos.

El presidente yemení, Ali Abdula Saleh, advirtió de que tomará medidas severas, similares a las estipuladas en la ley antiterrorista, contra los responsables de los secuestros de turistas extranjeros. "Los secuestros afectan a la reputación y la economía del Yemen, así que los vamos a eliminar, al igual que erradicaremos el terrorismo", dijo el presidente después de despedirse de los cinco rehenes alemanes liberados el sábado, que partieron a su país, y entre los que está el ex secretario de Estado Jürgen Chroborg.

Este ex diplomático alemán permaneció secuestrado junto a cuatro miembros de su familia durante casi una semana. Fue liberado en una operación militar, durante la que sus captores fueron detenidos.

Por otra parte, más de 56 personas murieron y al menos 50 permanecían ayer desaparecidas como consecuencia de un corrimiento de tierras que sepultó una parte del pueblo yemení de Al Dhaftir, situado a unos 70 kilómetros al oeste de Saná, la capital de este país situado en el sur de la Península arábiga. El accidente, cuyo origen no había podido ser determinado ayer, se produjo en la noche del miércoles al jueves, pero no fue conocido hasta el viernes.