Precios más altos en 2006
El año se estrena con subidas de la luz, el gas y los transportes públicos
Si puede, apague la luz. Y si su calefacción funciona con gas natural, será mejor que baje también la temperatura del termostato. Y es que el año 2006 se inicia con una subida energética. La luz subirá para los hogares más del 5% en las dos revisiones tarifarias que va a haber durante el año. Las empresas lo tienen aún peor, porque la subida es mucho mayor.
El Gobierno y las empresas justifican estas subidas por el encarecimiento del petróleo y por la contención, no muy justificada, que hubo durante las legislaturas anteriortes. Un argumento que también aducen comunidades autónomas y ayuntamientos para volver a encarecer los precios de los transportes públicos, que dicen promocionar, muy por encima del coste general de la vida.
Pero no todo es malo para el bolsillo de los ciudadanos con el nuevo año. Los pensionistas recibirán una paga extra en enero y verán cómo sus pensiones suben por encima de la inflación. También se congelan las tarifas telefónicas y los impuestos de alcohol y tabaco. Y bajan un año más los medicamentos. El resto de los impuestos apenas varían.
- Electricidad y gas. Tras seis años de bajadas (1996-2001), uno de congelación (2002) y tres de aumentos por debajo de la inflación (2003-2005), la factura de la luz alumbra más. Los 22 millones de hogares deberán afrontar ya en enero una subida media de la tarifa eléctrica doméstica del 4,48%. Para las industrias, la subida será superior al 5,06%. Pero no será la única. En julio, la luz volverá a subir, en un porcentaje aún por determinar, con un límite máximo del 1,5%. Y aún habrá una tercera subida para aquellos consumidores que gasten demasiado. Con el argumento de fomentar el ahorro, el Gobierno ha introducido una penalización para el consumo excesivo de 1,3 céntimos por kilovatio por encima de un consumo mensual de 650 kilovatios.
Oficialmente, este aumento se justifica para compensar el déficit que dicen sufrir las eléctricas en sus resultados por el desfase entre la tarifa regulada por el Estado y los costes de generación de la electricidad. Unos costes que no les impidieron obtener beneficios récords de más de 3.000 millones de euros en los nueve primeros meses del año.
La tarifa especial de los 100.000 trabajadores y jubilados de las empresas eléctricas, que disfrutan de descuentos de hasta el 90%, deberá desaparecer o ser costeada por las propias empresas. La única buena noticia es que no sube la tarifa social, de la que se benefician los consumidores, con potencia inferior a 779 vatios, alrededor de 100.000 personas.
Intentar cambiar de fuente energética tampoco será una buena solución para ahorrar. El gas natural, que en 2005 se encareció más de un 10%, vuelve a subir un 4,24% a partir de 2006. Para la industria, la subida estará en torno al 10,75%, tras el aumento del 15% que se les aplicó el pasado mes de octubre.
- Gas butano. La bombona de butano también será más cara con el nuevo año. El butano costará un 10,3% más, con lo que la botella de 12,5 kilos, la tradicional anaranjada, valdrá 11,24 euros, algo más de un euro más cara. El precio del butano se volverá a revisar al menos otras tres veces durante 2006, en abril, julio y octubre.
- Teléfono. En 2006 no subirá la cuota de abono mensual de Telefónica, el concepto más importante de la factura telefónica de un consumidor medio, que paga más por esta cuota -actualmente fijada en 13,43 euros al mes sin IVA (26,86 en el recibo bimensual)- que por el consumo de llamadas. Se trata de la primera vez que no sube el abono mensual desde 2000, año en que entró en vigor el sistema de precios regulados al que se sujeta la operadora.
Asimismo, se congelan los precios del conjunto de llamadas, ya que las variaciones de precios que aplique Telefónica a los diferentes tipos de llamadas no podrán hacer subir la factura media. La otra gran novedad es que, a partir de este mes, Telefónica está obligada a facturar por segundos todas las llamadas desde un teléfono fijo. Las compañías de telefonía móvil pueden fijar libremente sus precios, pero también están obligadas a contar con un plan de tarifas que incluya la facturación por segundos. En 2006 tampoco suben las llamadas desde cabinas ni al teléfono de información 11818.
- Correos. Enviar una carta no resultará más caro a partir del próximo año. La sociedad pública de correos ha decidido mantener en 0,28 euros el precio del sello durante 2006 para envíos ordinarios nacionales (cartas y tarjetas postales de menos de 20 gramos de peso). En realidad, supone una rebaja en el precio de los sellos, puesto que la entidad estatal empezará a incluir un IVA del 16% para los envíos locales.
- Renfe. El consejo de la empresa de ferrocarriles propondrá una subida de billetes de cercanías, regionales similar al 6% que aplicó a principios de 2005. También elevará los precios para el AVE y las Grandes Líneas (Euromed, Alaris...). No obstante, la cuantía de la subida no se conocerá probablemente hasta el próximo 12 de enero, cuando se reúna la Comisión Delegada de Asuntos Económicos del Gobierno para aprobarlo. Sin embargo, el billete del AVE Madrid-Lleida se abaratará cerca de un 16% para asemejar las tarifas con el de Sevilla.
- Transporte urbano. Los ayuntamientos de las grandes ciudades deben creer que el mejor método para promocionar el uso del transporte público es subir su precio, año tras año, muy por encima de la inflación. El 2006 no es una excepción. Con la excusa del encarecimiento del petróleo y la ampliación de la red, se han aplicado aumentos espectaculares en los últimos años. El Consistorio madrileño es un buen ejemplo. El transporte público sube una media del 4,87%, aunque el billete de 10 viajes aumenta un 6,03% y ya vale 6,15 euros. En los últimos seis años, el incremento del precio del transporte ha sido del 36%.
El Ayuntamiento de Barcelona no le va a la zaga. La subida del transporte público para 2006 en dicha ciudad será del 4,7% de media, aunque el abono más utilizado, el T-10, tendrá una subida mayor: el 5,56%. Costaba 6,30 euros y pasa a 6,65 euros. El billete sencillo costará 1,20 euros, con un alza interanual del 4,3%. Desde la entrada en vigor del euro, los precios de esta tarifa han aumentado un 25% tanto para el billete sencillo como para la T-10.
Por su parte, los Transportes Urbanos de Sevilla, SAM (Tussam) mantienen el billete de un viaje en 1 euro; el bono 10 viajes con transbordo de 5,00 euros a 5,15 euros, y el abono mensual de 23 euros a 24 euros.
- Transporte por carretera. Las tarifas de autocares de línea subieron una media del 3,3% el pasado 1 de diciembre, debido al paquete de medidas que el Gobierno aprobó para compensar a los transportistas de mercancías y viajeros por el encarecimiento del combustible. La revisión del billete se sumó al incremento del 3,04% ya aplicado en el primer cuatrimestre de 2005. El 1 de abril de 2006 se volverá a revisar al alza el precio de los billetes.
- Alcohol y tabaco. Los impuestos especiales sobre el tabaco y el alcohol se mantendrán congelados durante el próximo año. Durante 2005, el Gobierno ya aprobó una subida extraordinaria del impuesto sobre el tabaco del 5,3% y del 10% sobre el alcohol para ayudar a financiar el déficit sanitario de las comunidades autónomas, que tienen una participación del 40% en estos impuestos.
- Peajes. El peaje de las autopistas dependientes de la Administración General del Estado sube una media de entre el 3,3% y el 3,5%, el aumento más alto de los dos últimos años.
- Pensiones. Los 8,5 millones de pensionistas cobrarán a partir del día 20 de enero una paga extraordinaria para compensar la desviación entre la inflación real y la presupuestada en 2004. El importe medio de esta paga adicional asciende a 132,11 euros, aunque variará según los casos. Además, los pensionistas se beneficiarán a partir de enero de las subidas que oscilan entre el 3,4% y el 7,96% según la modalidad.
Una vez que se apliquen los nuevos incrementos en las pensiones para 2006, la pensión media de jubilación se sitúa en 710,86 euros al mes. Las pensiones mínimas serán las que más subirán, con un alza de entre el 4,42% y el 7,96%.
Los incrementos mayores serán para los titulares que tengan cónyuge a su cargo, que se beneficiarán de una subida del 7,96%. Se les aplicará la misma subida a los pensionistas con incapacidad permanente con cónyuge a su cargo. Además, se les sumará un alza de cerca del 6,5% a los jubilados sin cargas familiares, a las pensiones de viudedad, de orfandad y favor de familiares. Las pensiones no contributivas crecerán un 4,42%.
- Indicador de rentas. El Indicador Público de Rentas con Efectos Múltiples (IPREM), que sirve de referencia para calcular la cuantía de las prestaciones, ayudas y subvenciones (becas de estudio, de comedor o acceso a la vivienda pública entre otras) crecerá en un 2%, hasta 479,2 euros al mes.
- Salario mínimo. El salario mínimo interprofesional (SMI), que afecta a cerca de un millón de trabajadores, crecerá un 5,4% hasta los 540,9 euros. El Gobierno pretende equiparar las pensiones de viudedad con el salario mínimo. Desde el año pasado se incluye una cláusula de garantía salarial, en caso de que el incremento pactado resulte menor a la inflación real de los 12 meses anteriores, la diferencia se tendrá en cuenta en subidas posteriores.
- Actualización IRPF. El único cambio previsto en el impuesto sobre a renta consiste en la variación del deflactor sobre la tarifa del IRPF, que consiste en eliminar el efecto del incremento de los precios de forma que la equiparación de los salarios con la inflación no signifique pagar más a Hacienda. En 2006, el Ejecutivo ha calculado una subida próxima al 2% (como el año anterior). Esta actualización se realiza utilizando la inflación prevista en lugar de la real y sólo se aplica a la tarifa, no al mínimo personal y las deducciones, que supondrá un ahorro para los contribuyentes de 226 millones de euros.
- Fármacos. Tal vez la mejor noticia para los consumidores, ya que se esperan dos bajadas. El 1 de marzo próximo, y dentro del plan estratégico de política farmacéutica, se incluye una rebaja del precio de los fármacos del 2%, así como la reducción del margen de distribución en un 1%. Además, se está tramitando en el Parlamento la Ley del Medicamento, que pretende rebajar el gasto farmacéutico para el Estado en un 25%. Cuando entre en vigor esa ley (no antes de junio de 2006), todos los fármacos de más de diez años de antigüedad que cuenten con un genérico en la UE reducirán su precio un 20%.
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