La UE concede a Macedonia el estatuto de país candidato

Los jefes de Estado y de Gobierno de los Veinticinco acordaron ayer conceder a Macedonia la condición de país candidato a la integración en la Unión tras haber llegado a un acuerdo sobre las perspectivas financieras. Pero, como muestra de las dudas que todo el proceso de ampliación induce en esta traumatizada UE, se abstuvieron de fijar fecha para apertura de negociaciones de adhesión con este país balcánico de dos millones de habitantes.

También vincularon su aprobación a condiciones que convertirán el hipotético ingreso macedonio en el que más trabas haya tenido que salvar hasta ingresar en el club. El visto bueno a la Antigua República Yugoslava de Macedonia fue otorgado inmediatamente después de que hubiesen despejado el horizonte sobre las perspectivas financieras. Como habían venido señalando algunos países y hasta el propio presiente de la Comisión, José Manuel Durão Barroso, "no podemos hablar de futuras ampliaciones sin resolver antes la financiación de la última", la que en mayo de 2004 introdujo diez nuevos países.

Fueron los líderes de la Unión quienes tuvieron que decidir sobre el asunto después de que a principios de semana sus ministros de Exteriores no se atrevieran a avalar la recomendación de admisión elevada por la Comisión al Consejo. Macedonia vio allanado su camino por los sustanciales progresos realizados en política interna, en relación con la minoría albanesa, y la buena marcha del acuerdo de estabilización y asociación con la UE. No obstante, la adhesión queda supeditada, entre otros, a los resultados del debate que en 2006 mantendrán los 25 sobre la estrategia de la futura ampliación.

Francia y Holanda, que votaron no a la Constitución, en parte como respuesta a lo que consideran precipitada ampliación anterior, y Dinamarca fueron los que más reticencias manifestaron ante la futura incorporación. Para el resto, se trataba de confirmar la llamada "perspectiva europea" para los países balcánicos adoptada en junio de 2003 en Salónica.

Cola de futuros socios

Skopje pudo celebrar el acuerdo como una consolidación: en 2001 Macedonia estaba al borde de la guerra civil, antes de alcanzar un acuerdo, patrocinado por la UE, para compartir el poder con la minoría albanesa. Macedonia se suma a una cola de futuros socios en la que ya están Bulgaria y Rumania, que accederán en 2007, y Croacia y Turquía, que comenzaron sus negociaciones en octubre.

Sobre el acuerdo de ayer planea la amenaza de la presunta complicidad del Gobierno macedonio en el secuestro en su territorio de un ciudadano alemán, Khaled el Masri, por agentes de la CIA que lo trasladaron a Afganistán. La UE tiene advertido que países implicados en detenciones irregulares podrían ver sus solicitudes de ingreso paralizadas o suspendidos determinados derechos en el caso de ser ya miembros de pleno derecho.

El Consejo Europeo también aprobó una declaración sobre Oriente Próximo y el Mediterráneo a partir de la invitación de las partes a resolver sus conflictos por vía pacífica. Los líderes europeos consideran que la misión de asistencia fronteriza en el paso palestino de Rafah prueba la determinación de la UE en ayudar a las partes a encontrar una solución definitiva al conflicto israelo-palestino.

Tras felicitarse por la celebración de las elecciones en Irak, el Consejo reconoce que en el país siguen existiendo profundas divisiones y apela a las partes a saldarlas mediante acciones pacíficas. La UE reitera su apoyo a un Líbano unido, estable e independiente y condena el asesinato del parlamentario y periodista Gibran Tueni, último en una serie de eliminaciones de líderes libaneses, entre los que se encuentra el ex primer ministro Rafik Hariri.