El joven caballero Tirant
Una de las consecuencias positivas del año del Quijote ha sido la reflexión sobre la importancia de la lectura de clásicos por los niños. Los expertos recomiendan (por ejemplo, Francisco Jarauta, Carmen Domínguez, Ángel Basanta, Emili Teixidor y Teresa Colomer, entre otros, acaban de hacerlo en el XI Simposio de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez En torno al Quijote. Lectura, escuela e infancia, celebrado en Madrid del 24 al 26 de noviembre) la iniciación temprana a los clásicos mediante la narración oral, para los más pequeños; la lectura de fragmentos en voz alta en las aulas; las adaptaciones ilustradas; las versiones con calidad literaria... Los editores han tomado nota, y ya tenemos dos primeras muestras, excelentes, de adaptaciones del gran clásico valenciano Tirant lo Blanc, de Joanot Martorell (1413-1465), según Cervantes "el mejor libro del mundo", cuyo V centenario se celebró en 1990.
La de Bromera, pensada para lectores de 11 años en adelante, es una amena y actualizada versión del autor valenciano Josep Palomero (traducida al castellano por Vicente Muñoz Puelles, en Algar), mientras la de Edebé es preparada por la profesora Rosa Navarro, especialista en literatura del Siglo de Oro. Se ajusta a niños de 8 años en adelante. Estas ediciones de la gran novela de caballerías de la literatura española llegan en un momento muy oportuno: en plena fiebre por la literatura fantástica, un género que tiene en lo medieval, en las aventuras caballerescas y amores una de sus principales fuentes, el Tirant es un feliz descubrimiento.
