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La red de enseñanza concertada

Hace cerca de un año este mismo diario, en las páginas semanales que dedica a Educación, publicaba un interesante reportaje sobre las cooperativas de enseñanza. Y las presentaba así: "Habitualmente, cuando se habla de la enseñanza concertada, se la relaciona con los colegios religiosos. Y sin más distinción se despacha el asunto. Aunque éstos son mayoría, se trata de una visión incompleta. Hay otras concertadas. Por ejemplo, las cooperativas escolares. Son un sistema híbrido entre lo público y lo privado o, como los cooperativistas gustan decir, tienen lo mejor de los unos y de los otros".

Me pareció entonces que era una manera muy apropiada para situar al lector. Tanto es así que utilizamos estas mismas palabras hace dos semanas para presentar el tema a los periodistas con motivo del I Congreso de la Federación de Cooperativas de Enseñanza de Euskadi. Lo acabamos de celebrar, con notable éxito, los días 17 y 18 de noviembre en el Palacio Euskaduna de Bilbao.

La Federación de Cooperativas de Enseñanza de Euskadi se adhiere al concepto de "servicio público"

Ciertamente, nada más mencionar la red concertada de enseñanza, en la opinión pública se enciende automáticamente la imagen de los centros religiosos, de los colegios privados. Y esa, hoy y aquí, no deja de ser una imagen nada actualizada, hace tiempo caducada, a pesar de la poca percepción que al respecto hay en la opinión pública.

Mencionaré un hecho reciente con el fin de contribuir a aclarar malentendidos.

La semana pasada, mientras nosotros celebrábamos nuestro primer congreso, en Madrid la cúpula de la Conferencia Episcopal se reunía con una representación del Gobierno Zapatero. Hablaron, claro está, de la LOE. Durante la reunión, según refirió este mismo diario, "levantó ampollas entre los obispos" el que los portavoces gubernamentales consideraran la educación como "servicio público". Proponían sustituir el término "servicio público" por "derecho esencial".

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Pues bien, las cooperativas de enseñanza no sólo nos adherimos al concepto de "servicio público", sino que más bien reclamamos su aplicación junto con el de "centros sostenidos con fondos públicos". Tanto es así que el presidente de la UECOE (Unión Española de Cooperativas de Enseñanza), Carlos Sierra, el pasado día 21 de noviembre asistió a una reunión convocada por el presidente Rodríguez Zapatero, en la que le dio cuenta de la posición de la cooperativas de enseñanza respecto de la LOE. Sobre la organización del sistema educativo, dicha posición expone el siguiente punto de partida: "La creación de un Servicio Público de Educación en el que todos los centros sostenidos con fondos públicos tengan iguales derechos e iguales obligaciones". Se trata de una aportación de las cooperativas vascas al texto estatal.

Sé que no resultará fácil actualizar el vetusto concepto de las redes educativas, basado en la titularidad de los centros, con este otro, ligado al servicio que prestan. Sé también que ahí estriba gran parte de la carga del cambio de mentalidad hoy en lo que a la organización del sistema se refiere y que las cooperativas de enseñanza representan.

Aquí, donde los sectores paradójicamente progresistas tienen perfectamente arraigado el modelo napoleónico del sistema educativo, inspirado en la organización de su ejército imperial, no se presta ninguna atención a los modelos escandinavos, por ejemplo. Pongamos por caso Suecia, donde los centros de titularidad pública cuentan con tal autonomía que sus directores llegan a decidir hasta el sueldo de los maestros, o en el que la Administración educativa planifica su labor y financia la misma contando con los centros en función del servicio que prestan y no de la titularidad a la que responden.

No será, pues, tarea fácil, el reciclaje. Pero igualmente cierto es que el mismo se impone inexorablemente. Recuperarse de los sinsabores del informe Pisa también pasa por ahí.

Imanol Igeregi es presidente de la Federación de Cooperativas de Enseñanza de Euskadi.

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