Una exposición recorre en Tolosa la historia de las marionetas chinas

Tienen más de 2.000 años de historia y nacieron ligadas a los funerales y a las bodas. Son las marionetas chinas. Bajo una cálida luz y una relajante música oriental, el Palacio Aranburu de Tolosa muestra desde ayer, y hasta el próximo 4 de diciembre, la historia de este arte milenario. Más de 400 piezas difunden la belleza plástica y la complejidad técnica de los títeres de guante, varilla, hilo y sombras del país asiático.

Un grupo de campesinos estaba cavando en 1978 una bodega para almacenar patatas dulces para el invierno cuando descubrió una tumba funeraria de la Dinastía Occidental Han (206 A. C.-8 D. C.). Los labradores encontraron allí una marioneta de madera que al parecer había sido usada en un rito funerario. Aquel hallazgo se convirtió en una importante prueba que corroboraba que los títeres ya se utilizaban en China hace más de veinte siglos, según recoge La historia de la marioneta china: su evolución a lo largo de los últimos 2.000 años desde el objeto funerario hasta un arte teatral.

Con sus más y sus menos, y dejando paso a algunos elementos modernos, China ha mantenido hasta hoy la tradición de las marionetas. No es de extrañar, por tanto, que este país estuviera desde hace tiempo en el punto de mira del Festival Internacional de Marionetas de Tolosa. Tras varios años de contactos y largas negociaciones, Titirijai abre por fin su ventana al gigante asiático con una amplia exposición de títeres procedentes de diferentes teatros y colecciones privadas, a la que hay que sumar cinco espectáculos.

La exposición Ventana a China, comisariada por Simon Wong, arranca recordando los orígenes de la marioneta en China y las cuatro técnicas -guante, varilla, hilo y sombras- que se utilizan en las representaciones teatrales. Tras presentar a los personajes o referentes habituales en los títeres chinos, como el hombre, la mujer, el viejo o el payaso, la exposición se detiene, a través de un buen número de piezas, en cada una de las técnicas apuntadas al principio.

Títere televisivo

En su recorrido por la muestra,los visitantes podrán contemplar al Rey de los Monos, protagonista de la clásica obra literaria Viaje al Oeste. O a Pili, una marioneta, masculina, que, con su propio canal de televisión, es toda una estrella en Taiwan, según explican los codirectores de Titirijai, Miguel Arreche e Idoia Otegui. Junto a esos títeres se exhiben otros muchos que dan cuenta de la riqueza de esta cultura milenaria, que conlleva un laborioso trabajo. La exposición incluye un apartado donde se pueden comprobar los muchos pasos que es preciso dar para que un simple trozo de madera se convierta en una marioneta de cara maquillada y vistosas vestimentas.

En cualquier caso, dentro del mundo de las marionetas chinas también han logrado hacerse un hueco en los últimos tiempos piezas que poco tienen que ver con la tradición o con un diseño cuidado. Pero como Ventana a China pretende ser lo más completa posible, el festival tolosarra ha cedido espacio también a títeres que recuerdan más a personajes de Walt Disney que a referentes de la cultura del país oriental, según comenta Arreche.