Los contrarios a la 'narcosala' rechazan también un centro para mendigos

Los vecinos de Vall d'Hebron que se oponen a la narcosala, instalación sanitaria en la que las personas drogodependientes pueden inyectarse con todas las garantías, continúan manteniendo su oposición a este centro. Pero ahora tienen un nuevo objetivo en el que centrar su oposición: la casa de acogida para indigentes que el Ayuntamiento de Barcelona quiere levantar en el barrio. Ayer, por primera vez en las últimas 23 semanas, los vecinos no cortaron la Ronda de Dalt para exigir el cierre de la narcosala. Unas 700 personas se dirigieron en manifestación a la plaza de Botticelli, donde el consistorio tiene previsto ubicar la casa de acogida para mendigos. Asimimo, los manifestantes se oponen a la instalación en el barrio de un centro para jóvenes. Un fuerte dispositivo policial controló a los concentrados desde la distancia e impidió que los congregados, que en ningún momento hicieron intento alguno de penetrar en la Ronda de Dalt, pudieran cortar la citada vía.