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Platzeck logra un apoyo unánime como nuevo presidente del SPD

El 99,4% de los delegados le dieron su voto

El Congreso del Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD) eligió ayer en Karlsruhe al primer ministro del Estado federado de Brandeburgo, Matthias Platzeck, de 51 años, como nuevo presidente, con el 99,4% de los votos de los delegados.

Con esta elección, dos políticos de la misma edad, de origen burgués, de formación científica y oriundos de la desaparecida República Democrática Alemana (RDA) presidirán los dos grandes partidos alemanes, el SPD y la Unión Demócrata Cristiana (CDU), que dentro de una semana formarán el Gobierno de gran coalición. Platzeck y la presidenta de la CDU y futura canciller, Angela Merkel, tienen una biografía con muchos puntos comunes.

El difunto dictador de la RDA Erich Honecker podría revolverse en su tumba corroído por la envidia ante el porcentaje de votos obtenido ayer por un antiguo súbdito suyo en el congreso del SPD en Karlsruhe. Tras declarar que se encontraba "un poco emocionado", el mismo Platzeck comentó: "Un compañero del Este me dijo que el porcentaje recuerda viejos tiempos, pero se ha conseguido de forma regular".

El mismo SPD, cuya comisión ejecutiva hace dos semanas en Berlín votaba por 23-14 contra el candidato general que proponía el presidente, Franz Müntefering, eligió ayer en el congreso por 512 votos a favor, dos en contra y una abstención a Platzeck como presidente.

El congreso eligió por sólo un 61,7% de votos al nuevo secretario general, Hubertus Heil, de 33 años, propuesto por Platzeck para el cargo. Heil, del grupo centrista del SPD denominado La Red, movió los hilos en contra del candidato de Müntefering a la secretaría general. Ayer el congreso le castigó con una votación escasa comparada con las abrumadoras mayorías obtenidas por Platzeck y sus vicepresidentes.

Todo esto puede interpretarse como un síntoma del estado ciclotímico en que se encuentra el SPD en vísperas de perder la cancillería y entrar en una gran coalición que hace un mes nadie quería, pero que viene impuesta por el resultado electoral de casi empate con la CDU-CSU del pasado 18 de septiembre. El porcentaje conseguido por Platzeck supera a los que llevaron al gran líder de la socialdemocracia en la posguerra Willy Brandt a presidir el SPD. La última vez que el congreso eligió a Schröder para presidente, hace ahora dos años en Bochum, lo hizo con el 80,93% de votos y se trataba del canciller federal. Sólo Kart Schumacher en 1947 y 1948 tuvo más votos que Platzeck, que se ha convertido en la gran esperanza del SPD.

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Latiguillo

Antes de la votación, Platzeck pronunció un discurso de hora y cuarto en el que cuesta trabajo encontrar el impulso programático capaz de sacar al SPD de la crisis enmascarada por el casi empate con la CDU-CSU. No faltó en el discurso el latiguillo "Alemania es un país maravilloso" que repite desde hace días en cada una de sus intervenciones. Platzeck lleva sólo 10 años de militancia en el SPD. No ha pasado por la dura escuela de las Juventudes Socialistas (Jusos) como los llamados nietos de Brandt o la generación del 68 que ahora empieza a perder el poder. Platzeck y Merkel en la CDU son la expresión palpable de la llamada generación de 1989, el año de la caída del muro de Berlín.

Evocó Platzeck a su padre, ya fallecido, que cuando su hijo ingresó en el SPD le dijo: "Si entras en un partido, que sea para presidirlo". En 1968, siendo Platzeck militante de las juventudes comunistas, su padre le despertó un día de agosto y le dijo: "Tus comunistas han invadido Checoslovaquia".

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