Ford y Fiat acuerdan fabricar dos modelos de coches en Polonia

Ford España confirmó ayer oficialmente que su planta de Almussafes (Valencia) dejará de fabricar el modelo Ka (uno de los cuatro que produce) en 2007. Ford dijo, con todo, que compensará la pérdida de esta producción con el aumento de las unidades de los otros modelos. El compromiso alcanzó al empleo. Ayer se firmó el acuerdo definitivo de colaboración entre Ford y Fiat para fabricar dos modelos de coches pequeños en Polonia.

El acuerdo de colaboración firmado ayer entre Ford y Fiat se traducirá en la fabricación de dos vehículos pequeños para Europa que saldrán al mercado en el periodo 2007-2008. Uno de estos vehículos será el nuevo Fiat 500, y el segundo, el sustituto del Ford Ka. Ambos modelos se fabricarán en las instalaciones de Fiat en Tychy (Polonia) con motores Fiat fabricados en Polonia e Italia. La previsión es fabricar al año 240.000 unidades.

Ford y Fiat dijeron que, pese al desarrollo y producción conjuntos, los vehículos serán "muy diferenciados". La colaboración, añadieron, beneficiará a las compañías por la reducción de costes de desarrollo y "la optimización de economías de escala en la fabricación y suministro de componentes".

El consejero delegado de Fiat, Sergio Marchionne, consideró que el acuerdo supone "otro hito" en su estrategia "de búsqueda de alianzas cuyo objetivo es el de compartir recursos financieros e industriales en nuevos productos y plataformas". Y el presidente de Ford Europa, John Fleming, tildó a Fiat de "socio ideal", y dijo que el acuerdo "brinda la oportunidad de reducir el coste unitario", al tiempo que se desarrollan "productos altamente competitivos".

Cautela sindical

Junto a esta decisión se produjo la confirmación oficial de que la planta valenciana de Ford dejará de fabricar el modelo Ka -también fabrica Focus (casi el 60% del total), Fiesta y Mazda- en 2007. El Ka se fabrica en Valencia desde 1996 y su producción supone ahora el 15% de los 1.800 vehículos diarios. La planta da trabajo directo a 7.500 personas. Ford quiso transmitir tranquilidad y aseguró que cuando este modelo deje de fabricarse, la caída de producción se compensará con el aumento de las unidades en otros modelos. El compromiso alcanzó al empleo.

Los sindicatos esperaban la noticia y la valoraron con cautela. El secretario general de UGT en la planta (mayoritario), Gonzalo Pino, valoró el compromiso de Ford sobre la carga de trabajo. Un compromiso, recordó, que el sindicato lleva tiempo solicitando. Pino se mostró cauto a la espera de la evolución del compromiso. En esta línea, el responsable de CC OO en la factoría, Miquel Rosaleny, mostró preocupación a la espera de que Ford dé "una alternativa" y les concrete cómo quiere mantener la carga de trabajo.