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La minería del carbón convoca dos días de huelga esta semana

Industria y los sindicatos intentarán mañana evitar los paros

Los 8.694 mineros que trabajan en el sector del carbón han sido convocados a una huelga de 48 horas para el jueves y viernes próximos. Será la primera gran movilización en el sector desde 1998 si en la próxima reunión negociadora que sindicatos y Ministerio de Industria mantendrán mañana miércoles no alcanzan un acuerdo sobre el plan del carbón para el periodo 2006-2012.

Con el paro, los mineros exigen que se les respeten las actuales condiciones de prejubilación, que permiten a muchos mineros abandonar la actividad a los 40 o 42 años de edad. El ministerio pretende retrasar esa edad hasta los 45 años a partir de 2008. Casi la mitad de los mineros del carbón (4.427) se localizan en Asturias, mientras el resto se reparte entre Castilla y León (3.029), Galicia, Aragón, Andalucía, Castilla-La Mancha y Cataluña.

El sector carbonero español, fuertemente subsidiado desde hace más de un siglo para que pueda sobrevivir frente al más barato mineral extranjero y la competencia de otros combustibles más económicos y limpios, sólo puede recibir ayudas, de acuerdo con las disposiciones de la UE, al cierre de empresas o a la reducción de actividad y costes.

España, Alemania, Polonia, Hungría, Reino Unido, República Checa, Eslovaquia y Grecia son los únicos países de la UE que todavía producen carbón. Francia cerró su última mina el año pasado y mucho antes ya lo hizo Bélgica.

El coste medio de una tonelada de carbón en España se sitúa en torno a 110 euros, frente a los 60 euros del carbón extracomunitario.

Reducción de actividad

En estas circunstancias, cada país productor ha de negociar planes sectoriales periódicos de reducción de actividad que posteriormente deben ser autorizados por la Comisión Europea en cumplimiento de los objetivos de disminución gradual pero sostenida de la actividad y de las ayudas públicas que recibe.

La negociación del nuevo plan español del carbón para el periodo 2006-2012, que se prolonga desde hace meses, ha allanado el acuerdo en los principales parámetros. El Ministerio de Industria aumentó su oferta inicial de producción (ocho millones de toneladas a fines de 2012) hasta los 9,2 millones de toneladas. Los sindicatos reclamaban en principio 10,5 millones de toneladas.

Actualmente, la producción está ya por debajo de los 12 millones. El Gobierno también se compromete a aportar 2.880 millones de euros (la propuesta inicial eran 2.730 millones) para las medidas de reactivación y diversificación del tejido económico que se vienen aplicando en las comarcas carboneras del país desde el inicio de su reconversión en los años ochenta.

A su vez, y aunque todos los planes han de conducir a la inexorable reducción de empleos y empresas, Industria se compromete a que el sector pueda formalizar 2.100 contratos para compensar los desequilibrios que pudieran producirse en las plantilllas como consecuencia de las prejubilaciones.

Recolocaciones

Los sindicatos reclaman 2.628 recolocaciones. Pero el escollo en la negociación y que ha resucitado la conflictividad en la minería energética es la edad de prejubilación de los mineros, una medida no traumática que se viene aplicando en el sector desde hace dos décadas para hacer posible la disminución del sector sin recurrir a despidos.

Desde los ochenta, los mineros se están prejubilando a los 52 años de edad resultante, pero muchos alcanzan esa situación con sólo 40 o 42 años de edad real, tras 25 años de cotización, al beneficiarse de los coeficientes reductores de jubilación que rigen en el régimen especial de la minería del carbón en consideración a la penosidad e insalubridad del trabajo. Las prejubilaciones con 40 o 42 años de edad se justificaron para acometer el gran ajuste del sector, que pasó de los 51.127 mineros existentes en 1981 a los 8.694 actuales sin recurrir a despidos.

Empleados de la mina de Cala (Huelva) en un descanso.
Empleados de la mina de Cala (Huelva) en un descanso.PÉREZ CABO

El PP recortó empleo

La negociación del nuevo plan para la minería española del carbón ha reabierto las tensiones en las minas de carbón, en las que desde 1998 no se habían producido situaciones conflictivas, pese a que el PP incumplió lo pactado entonces con los sindicatos y redujo el empleo y la producción del sector en el doble de lo firmado con los sindicatos.

Cuando el PP llegó al Gobierno, en 1996, había en España 24.610 mineros del carbón. El Gobierno del PP pactó con los sindicatos reducir el sector hasta los 17.000 mineros a fines de 2005, pero lo dejó en menos de 9.000. El ajuste laboral duplicó lo que se había negociado.

Los acuerdos para el periodo 1998-20005 establecían un recorte de producción de 17 a 13 millones de toneladas, pero el plan concluirá este año por debajo de los 12 millones, 1,7 millones de toneladas menos de lo acordado.

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