Los Mossos d'Esquadra empiezan a patrullar por las calles de Barcelona

Llegó el día D. Los Mossos d'Esquadra asumen desde hoy la seguridad ciudadana y el orden público en la ciudad de Barcelona y sustituyen a los agentes del Cuerpo Nacional de Policía (CNP). Dicho en cifras, de 1.600 agentes que tenía el cuerpo se pasa a los 2.614 agentes que tendrá la policía autonómica, al margen de las unidades especiales. Se ha hablado tanto del tema en las semanas previas al despliegue que lo único que deseaban los responsables de los Mossos d'Esquadra es que los coches patrulla empezasen a circular ya por la ciudad, como así ocurrió la pasada medianoche.

La consejera de Interior, Montserrat Tura, ha repetido una y otra vez que los agentes que de ella dependen trabajarán "con humildad, pero sin complejos". Con el despliegue de hoy, los Mossos d'Esquadra habrán asumido ya la seguridad ciudadana del 66% de la población de Cataluña y no será hasta el año 2010 cuando finalicen su despliegue en esta comunidad.

El Cuerpo Nacional mantiene amplias funciones y destinará parte de sus 1.600 agentes a la fiscalía y los tribunales

El despliegue se realiza sin estar acabadas las obras de las 10 comisarías, que no concluirán hasta dentro de dos años

La policía autonómica tendrá 2.614 agentes en la ciudad, que asumirán el orden público y la seguridad ciudadana

Tendrán una comisaría en cada uno de los 10 distritos de Barcelona, aunque sólo tres, las que la Generalitat compró al Ministerio de Interior por 14 millones de euros, funcionarán a pleno rendimiento. Son las de Nou Barris, Ciutat Vella y Sarrià. En las de Les Corts, Gràcia y Sants todavía queda algún retoque y para dentro de un año se inaugurarán las de Sant Andreu y Horta. A mediados de 2007 finalizarán las obras en la de Sant Martí y plaza de España.

Renovación de plantilla

Cuando Generalitat y ministerio firmaron la compra de las comisarías, el titular de Interior, José Antonio Alonso, aseguró: "la policía no se irá de aquí". Los responsables de este cuerpo aseguran que, con el despliegue, se producirá una renovación de la plantilla y que para cubrir las amplias funciones que siguen manteniendo, se realizarán cursillos de formación y especialización y se reforzarán los grupos adscritos a la fiscalía y a los tribunales. A los agentes que quieran cambiar de destino no se les pondrá ninguna pega en el próximo concurso.

El Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia CIvil, en el ámbito de la seguridad ciudadana, seguirá teniendo las competencias en la vigilancia de costas, fronteras, aduanas, así como la vigilancia y protección de los edificios dependientes del Estado. Un ejemplo es la fiscalía de Barcelona, situada en la calle de Pau Claris, pese a los intentos de la Generalitat de enviar a los Mossos d'Esquadra. José María Mena ha defendido que lo siga vigilando la Guardia Civil y así se comunicó a la consejera Tura unos días después de que un sargento de los Mossos se presentase en el inmueble para concretar el relevo el 1 de noviembre.

Del mismo modo, el CNP seguirá investigando las redes de tráfico de estupefacientes, los delitos tecnológicos y las tramas de blanqueo de capitales, aunque si el ámbito territorial de éstos es el de Cataluña, esa función también corresponderá a la policía autonómica. En esos casos, será el juez quien decida cuál de los dos cuerpos asume la investigación, como venía sucediendo hasta ahora entre el CNP y la Guardia Civil.

La lucha antiterrorista es otra de las competencias exclusivas del CNP y la Guardia Civil, así como la extradición y expulsión de inmigrantes, la expedición de DNI y pasaportes, el control de armas y explosivos o la lucha contra el contrabando y fraude fiscal.

El despliegue de los Mossos d'Esquadra en Barcelona viene precedido de la firma de un convenio de colaboración entre el Ayuntamiento y la Generalitat sin precedentes en ningún municipio de Cataluña donde ha empezado a actuar la policía autonómica. Y es que, a partir de hoy, funciona una sala de mando única entre la Guardia Urbana y la policía autonómica. Los Mossos, además, podrán poner multas de tráfico en la ciudad y compartirán datos y sistema de comunicación con los municipales.