Montilla acusa a la dirección del PP de fomentar la "catalanofobia" en España

El ministro de Industria y primer secretario del PSC, José Montilla, acusó ayer a la dirección del PP y a la radio de la Iglesia, Cope, de "alimentar la catalanofobia, de incitar al odio y la confrontación entre españoles y de sembrar cizaña". Montilla dijo del ex presidente José María Aznar que "ha hecho del hablar mal de España en el extranjero un provechoso oficio", y del presidente del PP, Mariano Rajoy, que "resulta realmente patético oír del que aspira a gobernar España que si se aprueba el Estatuto catalán, los Presupuestos de 2006 serán los últimos y desaparecerá el Ministerio de Hacienda".

La dureza de la intervención de Montilla contra la dirección del PP y la Cope sorprendió por proceder de un político moderado y discreto y al producirse en el foro de Europa Press en Madrid, en el que acudieron importantes empresarios como Florentino Pérez, de ACS; Eugenio Galdón, de Ono; Antonio González, de Enagas; Jaume Giró, de Repsol-IPF, entre otros, que aplaudieron la intervención del ministro. Fuentes del entorno de Montilla admitieron que su intervención responde a la preocupación por el efecto económico que se empieza a notar por la campaña contra los productos catalanes.

Montilla acusó al PP de eludir el debate sobre el Estatuto de Cataluña y, en vez de ello, "levantar banderas y cavar trincheras en la defensa de conceptos míticos que dicen que están amenazados" y que "conducirán a la quiebra de la convivencia cuando no están cuestionados en la reforma del Estatuto". "En el PP parecen haber triunfado los defensores de las verdades incontrovertibles e impermeables a la reflexión nacional", apostilló.

Al ex presidente Aznar le acusó de "ir más lejos en las proclamas tremendistas" al afirmar que la reforma del Estatuto "conduce a la ruptura de España y a la pronta balcanización" de la convivencia. "Nadie hizo más por el crecimiento de ERC que Aznar", apostilló ayer Montilla.

"El Estatuto es antiespañol"

El ministro se refirió a determinados medios de comunicación que están haciendo campaña contra los productos catalanes y citó a la Cope: "No encontrarán en ningún país de Europa un medio de comunicación que haga ese papel de incitar al odio y de sembrar cizaña". Montilla, que recordó que la Conferencia Episcopal es propietaria de la Cope, se refería a las manifestaciones del programa La mañana y de otros sobre Cataluña. Ayer mismo, Federico Jiménez Losantos, director de La mañana, animó a ese boicoteo: "El Estatuto es antiespañol de cabo a rabo y usted, señor Ferrer [presidente de honor de Freixenet], usted ha pedido ese Estatuto y ahora quiere vender Freixenet en toda España. Pues no, señor. No señor. No señor (...) Y ahora le da miedo porque viene la campaña de Navidad. Ya puede tener miedo, desde luego. Porque lo del boicot del año pasado va a ser una broma al lado del de este año (...) O sea, España como colonia de esa especie de república catalana independiente. No. Se ha acabado el chantaje".

Tras sus acusaciones al PP y a la Cope, Montilla, primer secretario del PSC, admitió estar de acuerdo en "gran parte" con el dictamen de los expertos, asumido por el PSOE y aceptó que "haya interpretaciones jurídicas que cuestionen la constitucionalidad de algunos preceptos" de la reforma. Montilla sostuvo que el modelo de financiación del proyecto de Estatuto, del que admitió que "es ciertamente de máximos", "está abierto a la negociación y no pierde de vista el concepto de solidaridad". También dijo que el debate sobre este asunto "ha sido deliberadamente envenenado" y negó que esté basado "en el Concierto y el Cupo". "Tiene vocación de poder generalizarse en sus aspectos básicos al conjunto del sistema autonómico". Admitió también que el modelo de financiación "no es el que hubiera hecho el PSC" sino que corresponde "a un acuerdo in extremis y a la correlación de fuerzas existente en Cataluña".

Por su parte, Mariano Rajoy, presidente del PP, replicó que los "más perjudicados por el disparate" del Estatuto son "los ciudadanos y las empresas de Cataluña" y se comprometió a visitar mucho Cataluña para "defender los intereses de los ciudadanos y de las empresas de Cataluña".