Los pescadores bloquean varios puertos en demanda de ayudas para el sector

Los pescadores españoles intensificaron ayer sus protestas ante la falta de acuerdo con el Ejecutivo sobre sus reivindicaciones por el alto precio del gasóleo. Los pescadores piden ayudas directas de hasta 100.000 euros por barco y subvencionar el litro de gasóleo a partir de 0,27 euros en lugar de los 0,50 actuales. Exigen una reunión urgente con la ministra de Agricultura, Elena Espinosa, la cual dijo que su propuesta compensa al 100% la subida del carburante. Las protestas se recrudecieron ayer con el bloqueo de los puertos de Barcelona, Valencia y Tarragona, y cortes de carreteras.

En una semana el conflicto ha pasado de las carreteras a los puertos. Los pescadores de Valencia, Murcia, Cataluña, y Andalucía han sido las comunidades más beligerantes, con bloqueo de puertos, amarre de la flota y cortes en carreteras.

Tras el fracaso de la reunión del pasado domingo entre la Asociación de Cofradías Pesqueras con el secretario general de Pesca, Juan Carlos Martín Fragueiro, las asociaciones pesqueras han intensificado sus protestas. "Las propuestas del Gobierno fueron las mismas que las del pasado 10 de octubre", aseguró el presidente de las cofradías, Juan Cervantes. El conflicto está encallado según los pescadores. Las cofradías aseguran que sólo se reunirán con la ministra, mientras que desde Agricultura se denuncia "la desunión del sector".

Elena Espinosa aseguró ayer desde Luxemburgo, tras participar en la reunión de ministros de Pesca de la UE, que está dispuesta a reunirse con los pescadores para "aclarar" la situación, pero que no aumentará su oferta. "Hemos ofrecido un incremento de ayudas exactamente igual al de los precios del carburante, un 40%", subrayó Espinosa.

El Gobierno ofrece una ayuda de 0,084 euros por litro de gasóleo. Los pescadores reclaman un aumento de las ayudas directas de carácter estatal desde 3.000 euros hasta 100.000 euros por barco y trienio. El Gobierno ha propuesto la creación de dos mesas sectoriales. Una de caracter social con la participación del Ministerio de Trabajo, donde se estudiará medidas como el aplazamiento de las cuotas de la Seguridad Social a los pescadores. También propuso crear una mesa de fiscalidad, que estudiará el abaratamiento de las primas de seguro o una deducción del 20% del Impuesto de Sociedades (IS).

Otra propuesta consiste en subvencionar el gasóleo mediante un fondo de garantía que sería costeado por pescadores, armadores y el Gobierno. Pero las partes no se ponen de acuerdo sobre su cuantía. Las cofradías quieren que se subvencione a partir de 0,27 euros por litro, y Agricultura cree que este umbral es muy bajo. Actualmente se paga un precio medio de 0,50 euros. Además, piden una reducción del 60% del IRPF, la exención del IS y exoneración de la Seguridad Social durante un año.

Mientras tanto, las movilizaciones se extienden. En Cataluña, las cofradías decidieron bloquear el puerto de Barcelona a partir de las 22 horas, de forma "total (pasajeros y mercancías) e "indefinida". Unos 50 barcos procedentes de otros puntos de la costa catalana se dirigían a formar el bloqueo. El puerto de Tarragona permanece bloqueado desde el domingo. Además cerca de 100 pescadores cortaron durante una hora la N-340, a la altura de L'Ametlla de Mar. Los pescadores de Girona se concentraron en La Jonquera, con cortes de tráfico en la autopista AP-7.

En la Comunidad Valenciana los principales puertos fueron bloqueados. Los barcos, que llevan sin faenar una semana, se agruparon en las bocanas de los puertos de Valencia, Castellón, Peñíscola, Gandía, Denia y Alicante. Varios barcos de pasajeros de la compañía Trasmediterránea se vieron afectados.

Las protestas tuvieron un seguimiento desigual en los puertos pesqueros andaluces, aunque todas las cofradías de pescadores y armadores coinciden en considerar insuficiente la propuesta del Gobierno para subvencionar el gasóleo. En la costa mediterránea, y en especial Almeria, los barcos quedaron amarrados, mientras que en el litoral atlántico postergaron una decisión similar a los próximos días.

En Galicia, los pescadores pusieron fin al amarre que la flota de bajura mantenía desde la pasada semana, y que afectaba a 8.000 marineros. Los pescadores vascos y cántabros tampoco se han movilizado, mientras en Asturias, los de Avilés volvieron a faenar.