Una persona fallece durante unos disturbios en Birmingham

Un hombre falleció anoche en unos disturbios que se propagaron en un barrio del norte de Birmingham desde media tarde. La violencia se desató a raíz de la supuesta violación de una niña de14 años por parte de un grupo de jóvenes la pasada semana. La víctima del ataque sexual es, al parecer, una inmigrante ilegal que no se ha identificado ni ha presentado una denuncia pese al compromiso de la policía de la región de investigar el caso con discreción.

Ayer, líderes locales y miembros de la comunidad de Lozells mantuvieron una reunión con un par de agentes de policía para intentar calmar la situación. Al mismo tiempo, un centenar de personas se manifestaba en las calles del barrio en apoyo de las víctimas anónimas. Ambos encuentros concluyeron pacíficamente, según informes locales, para más desatarse un campaña frontal entre grupos de jóvenes y las fuerzas antidisturbios. Anoche no estaba claro cuál fue la chispa que detonó los graves disturbios, que dejaron un saldo de un muerto y más de una decena de heridos, entre ellos un agente de policía.

La policía confirmó la baja mortal pero limitó la gravedad de los enfrentamientos, señalado que se habían producido "esporádicos incidentes de desorden". El diputado de la zona, Khalid Mahmood, censuró la violencia que, según dijo, puede enturbiar la difícil convivencia en Lozells, un distrito con un alto componente, en torno al 82,6%, de población de las minorías étnicas.

Según los medios británicos, hasta un centenar de jóvenes acechaban anoche las calles del barrio blandiendo bates de béisbol. Los incidentes parecen enfrentar a los sectores más jóvenes de las comunidades afrocaribeñas y asiáticas.