Armas de destrucción "másIBI"

Están en Madrid. Son armas de este alcalde que padecemos: tala árboles de forma feroz y vende la madera a pie de obra a una maderera de Guadalajara.

La M-30 es como una especie de Mesopotamia de la destrucción. En una orilla un mar de grúas, cientos de ellas socavando la tierra; y en la otra, Virgen del Puerto, caravanas de hormigoneras, camiones con hierros, una perforadora más alta que la casa en que vivo; todo sobre el aparcamiento que "salvó" al barrio en 1991. Y aún no ha empezado la tuneladora "más grande del mundo".

Sin embargo, ahora (después de haber talado más de mil), parece que talar un árbol va a costar carísimo. ¿Qué me tendrían que pagar a mí, que en 1991 salvé 60 acacias, y me encontré con dos días de arresto domiciliario "por destrozos"?

La guinda de este alcalde es el IBI, que este año viene con otro subidón; el anterior, en mi caso fueron 222,67 euros, y éste 258,79 euros, y lo más acongojante es que yo no soy propietaria, sino que lo son sucesivamente las inmobiliarias, que cambian de nombre para subir el alquiler, 333 euros al mes y mi pensión es de 322 euros.