Los cuatro ediles imputados por cohecho en Camas se declaran inocentes ante el juez

Los cuatro políticos imputados por el supuesto intento de soborno a una edil de Camas (Sevilla) se declararon ayer inocentes ante el titular del Juzgado de Instrucción 2 de Sevilla. El quinto implicado, el empresario Eusebio Gaviño, acudió al juzgado, pero alegó no encontrarse en "condiciones anímicas" para declarar. El abogado del alcalde, Agustín Pavón; y los letrados de los ediles de Camas Antonio Enrique Fraile y José del Castillo; y del ex concejal de Castilleja de Guzmán Aureliano Lucas coincidieron en que sus defendidos han sido víctimas de una "trama" urdida por los denunciantes del caso (la concejal no adscrita Carmen Lobo y su amigo Francisco Gordo) y el PSOE "para derrocar al gobierno municipal".

Los abogados de los cinco sospechosos de intentar comprar el voto de Carmen Lobo para que apoyara varios proyectos urbanísticos del gobierno de Camas insistieron ayer en la inocencia de sus clientes. Según los letrados, ni forman parte de una "trama urbanística" ni intentaron sobornar a la concejal. Al contrario, los abogados se aferraron a los mismos argumentos en los que se han amparado los implicados en sus comparecencias públicas: todo es un montaje de Francisco Gordo (ex militante de IU) y el PSOE para dañar al gobierno municipal.

Las comparecencias ante el juez instructor del caso, Luis del Oro, empezaron a las 9.30 y acabaron pasadas de las 15.00. El primero en entrar fue el empresario Eusebio Gaviño, quien, según las conversaciones grabadas por los denunciantes del caso, ofreció a Lobo cantidades millonarias a cambio de su voto. El empresario estuvo ante el juez apenas 15 minutos, pero no declaró. según su abogado, Jasé Manuel García Quílez, "no por negarse a declarar, sino porque no está en condiciones anímicas para hacerlo".

Según García Quílez, el nerviosismo de Gaviño era tan evidente que no necesitó presentar un certificado médico que avalara su situación anímica. "El juez lo ha visto tan mal que no ha hecho falta", explicó el abogado, quien señaló que el empresario está "muy disgustado" por la filtraciones del sumario publicadas en los medios de comuniciación. "En el momento en que esté un poco mejor, nos ofreceremos nosotros a declarar", aseguró el abogado.

El juez decidió el pasado miércoles levantar el secreto de sumario que pesaba sobre el caso, lo que permitió ayer a los abogados de los cinco implicados tener acceso a las diligencias y estar presentes en todas las declaraciones ante el juez. Fuera, en los pasillos del juzgado, esperaban su turno los implicados acompañados de familiares y simpatizantes políticos. Gaviño se cruzó a la salida con el edil Antonio Enrique Fraile (ex del PP) y se fundieron en un abrazo.

El segundo en comparecer fue el concejal José del Castillo, que concurrió a las elecciones municipales en las listas del PA. Tras la declaración, que se prolongó una hora y media, su abogado, José Ramos, insistió en que el concejal "no tienen nada que ver" con el soborno del que se le acusa. "Esto es una pantomima con dos protagonistas: [Carmen] Lobo y [Fancisco] Gordo", aseguró el letrado.

Según las grabaciones y las escuchas telefónicas de la policía, del Castillo participó en varias de las reuniones en las que supuestamente se fraguó el soborno. Su abogado, sin embargo, aseguró ayer que "si ha habido en algún momento una oferta económica, él se ha marchado de las reuniones". "Si ha habido alguna promesa económica ha sido siempre a instancias de [Francisco] Gordo", añadió el letrado.

Los comparecientes no escucharon las grabaciones que supuestamente les implican en el intento de soborno, pero sí les leyeron las transcripciones de las mismas. Ninguno de los abogados quiso hacer referencia a su contenido. "Nos las han leído, se han hecho preguntas referidas a ellas y se ha contestado razonablemente. No hay nada que ocultar", se limitó a explicar Pedro Pérez Montero, letrado de Fraile y de Aureliano Lucas, ex edil del PP en Castilleja de Guzmán.

Sobre la declaración de Fraile, el abogado aseguró que su defendido "nunca ha intentado comprar el voto de nadie". Fraile sí reconoció ante el juez como suya la letra de una nota manuscrita que Gaviño entregó a Lobo la noche antes del pleno municipal delpasado 13 de septiembre, el que destapó el intento de soborno. La nota recogía supuestamente qué debía votar la edil en cada punto del pleno. "Ha sido usada indebidamente", alegó el abogado de Fraile.Antonio Enrique Fraile abandonó los juzgados haciendo la señal de la victoria y levantando las palmas de las manos en señal de inocencia. Según su abogado, el concejal no ha cometido ningún delito. "Ni desde el punto de vista económico ni desde ningún otro. Todo lo que ha hecho desde su cargo de concejal ha sido para el beneficio de los ciudadanos", aseguró Pérez Montero.

Fraile y Agustín Pavón (ex de IU) se cruzaron en la puerta del Juzgado de Instrucción 2 y se fundieron en un abrazo. El alcalde de Camas declaró ante el juez durante una hora y tres cuartos. A la salida le esperaban una decena de simpatizantes que le recibieron entre aplausos y gritos de "¡Viva el alcalde!".

El juez interrogó a Pavón sobre su presencia en una reunión con Gordo en casa de Gaviño. El alcalde alegó que fue al encuentro para intentar un "acercamiento político" a la edil Carmen Lobo después de que Gordo le asegurará que había sido absuelta de un supuesto delito de fraude en la venta de un piso. Pavón había expulsado a Lobo de su equipo después de que un juez la condenara, lo que dejó al gobierno municipal sin mayoría frente a la oposición.

El letrado de Pavón, Lorenzo Rodríguez, aseguró asimismo que el alcalde abandonó la reunión en casa de Gaviño "por la provocación" insistente de Gordo que, según las grabaciones investigadas por la policía, le insultó en repetidas ocasiones. El abogado coincidió con la tesis del resto de los letrados: "Todo obedece a una trama urdida por unos miembros del anterior equipo de gobierno y supuestamente apoyados por el PSOE", señaló Rodríguez.

Los artífices de esa supuesta trama política son, según los ediles implicados, Gordo, Lobo y el PSOE de Camas. Algunos de los familiares que acompañaron ayer a los imputados repartieron fotografías con la cara del socialista Antonio Rivas, ex alcalde de Camas y actual delegado provincial de Empleo. Durante las comparecencias de Pavón y su abogado ante los medios de comunicación, una decena de simpatizantes del alcalde sostuvieron carteles en los que se podía leer: "Rivas, da la cara" y "Trama trampa".

El último en declarar ante el juez fue Aureliano Lucas, ex edil del PP en Castilleja de Guzmán, un municipio próximo a Camas. Según aseguró Gordo al denunciar el caso ante la policía, fue Lucas quien le llamó para ponerle en contacto con Eusebio Gaviño. Asimismo, los pinchazos de la policía al teléfono de Gaviño recogieron una llamada de Lucas tras el pleno del 13 de septiembre en la que el edil de Castilleja se interesa por saber por qué Lobo había votado en contra de los proyectos del gobierno. La comparecencia de Lucas ante el juez duró apenas 15 minutos. "La declaración ha sido brevísima porque tenía muy poca relación con este asunto". Según el abogado, la imputación de Lucas "probablemente se ha debido a un error". "Mi cliente nunca se ha puesto en contacto con Gaviño ni con Gordo", aseguró el letrado.

Tras las declaraciones de ayer, el juez citará a declarar en los próximos días a los denunciantes del caso.