Cristóbal Gabarrón muestra en Nueva York su pasión colorista por la figura humana

El hombre con toda su complejidad ha sido motivo de análisis y estudio del pintor y escultor Cristóbal Gabarrón (Mula, Murcia, 1945). En las 154 obras que se exponen en el Chelsea Art Museum de Nueva York, el artista profundiza en la figura del ser humano en sus diferentes vertientes. El comisario de la muestra, Donald Kuspit, destaca la pasión del artista y lo define como "maestro del color, imaginador de figuras y hacedor de arte humano y poderoso". A la inauguración, el jueves, asistió, entre otros, el artista Christo.

"Lo único verdadero son los colores. Un cuadro no representa nada más que colores"

"Me considero un artista manual al que le entusiasma poder manipular diferentes componentes"

Acercarse a la realidad, desnudar superficies y volúmenes, eliminar formas inútiles es lo que persigue Cristóbal Gabarrón en sus creaciones. El Chelsea Art Museum de Nueva York (www.chelseaartmuseum.org) expone desde el jueves hasta el 15 de enero un total de 154 obras del artista murciano en las que se muestra su trayectoria a lo largo de 40 años. La imagen del cuerpo en el arte de Cristóbal Gabarrón. 1963-2005 se exhibirá después en el IVAM de Valencia, del 27 de marzo al 28 de mayo de 2006. La directora de dicho centro, Consuelo Císcar, apunta que la creación de este artista está "alejada de toda corriente y tendencia artística y se compone de laberintos interiores y paisajes pluridimensionales que se prestan a varios tipos de interpretación".

La selección que se exhibe en Nueva York ha sido realizada por Donald Kuspit, profesor de Historia del Arte y Filosofía en la Universidad del Estado de Nueva York en Stony Brook, con un sentido técnico que pone de manifiesto la versatilidad de la producción del artista. Se han reunido pinturas y esculturas procedentes de museos de todo el mundo, colecciones privadas, de la Fundación Cristóbal Gabarrón (www.fc-gabarron.es) y de la familia del artista. El resultado es "una exquisita muestra que se mueve en torno a la imagen del cuerpo en la obra de Gabarrón, una constante en su trabajo que subraya a la vez su carácter humanista", indica Kuspit. La imagen del cuerpo en el arte de Cristóbal Gabarrón. 1963-2005 cuenta con un catálogo del que se han editado 2.500 ejemplares con textos en inglés y en español, compuesto por 400 páginas en el que se incluyen 500 fotografías de sus obras.

En la antología se pueden contemplar 30 esculturas de gran tamaño, algunas de ellas con más de 5 metros de altura, y 124 piezas pictóricas. En ellas, "se observa la temática que me ha preocupado a lo largo de mi existencia. Las piezas pasan por abordar la vida, el tránsito y la muerte con los materiales que he ido utilizando en los últimos 40 años. Resulta emocionante ver reunido mi trabajo. Cuando las desembalaban venían a mi mente recuerdos interesantes sobre mi evolución y me impresionó contemplar la obra que he ido realizando en este tiempo y cómo he ido pasando de la abstracción a la estructura lineal", apunta Gabarrón. A la entrada del Chelsea Art Museum se puede contemplar una escultura de cuatro metros que a juicio del comisario es una de las más representativas del artista.

Las pinturas de Gabarrón, según algunos críticos, "interpretan el proceso interactivo de pensar y sentir" y se le califica de "pintor humanista". "Mi interés por el ser humano es absoluto. Siempre me han gustado sus contradicciones, sus preocupaciones, sus pasiones, sus odios, en definitiva, todo lo que le preocupa, le angustia o le apasiona", señala el artista. En las obras expuestas, su autor interpreta el diálogo con formas y colores, con líneas y distancias, con transparencias y opacidades jugando con elementos muy diversos en los que ha ido indagando a lo largo de los años. "En las esculturas he trabajado la piedra, el cemento, el acero y el poliéster porque me ha gustado investigar con todo lo que ha ido cayendo en mis manos. Me considero un artista manual al que le entusiasma poder manipular y estudiar con diferentes componentes", puntualiza Gabarrón.

En las obras expuestas en el Chelsea Art Museum el comisario destaca el colorido con el que el artista impregna las piezas: "Alegre, brillante, intenso. La variedad de las texturas que utiliza -rayadas, salpicadas, unidas- es lo que le dota de ciertos tintes de misterio", señala el comisario. Para Cristóbal Gabarrón, "lo único verdadero son los colores. Un cuadro no representa nada más que colores. Es el elemento plástico por antonomasia, la quintaesencia de lo pictórico, el carácter sustancial de la pintura". El artista emplea el color para "expresar y construir ideas a través de las imágenes. Es una forma de expresar los sentimientos. Utilizo colores muy cálidos cuando quiero que el conflicto se plasme en las telas".

Este artista polifacético ha participado, entre otros, en proyectos relacionados con las Naciones Unidas, con los Juegos Olímpicos de Barcelona o la Expo 92, y este mismo año instaló 11 esculturas inspiradas en los personajes del Quijote por las calles y plazas de Nueva York cercanas al edificio de las Naciones Unidas.