Rodillas nuevas sin dolor

Desde noviembre de 2004, el hospital universitario Puerta de Hierro, de Madrid, está desarrollando como procedimiento habitual una nueva y ventajosa técnica de implantación de prótesis de rodilla mediante cirugía mínimamente invasiva. La técnica, que sólo requiere una incisión de 8 centímetros, viene a sustituir a la cirugía mínimamente invasiva practicada hasta ahora, que exigía una incisión de hasta 13 centímetros, y también a la cirugía abierta convencional, que suponía 25 centímetros de incisión y el consiguiente daño de toda la musculatura de la zona operada.

Puerta de Hierro es pionero en la aplicación de esta técnica dentro de la red sanitaria pública española.Para ello, especialistas del servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología se han formado específicamente en la técnica conocida, según la terminología anglosajona, como quad sparing (respeto del músculo cuádriceps). Igualmente, Alfred Tria, profesor de la Facultad de Medicina Robert Wood Johnson, de Nueva Jersey (Estados Unidos), y uno de los impulsores de esta innovadora cirugía, ha realizado en Madrid una sesión con los traumatólogos españoles. Este especialista implanta al año más de 200 prótesis con el nuevo método.

La prótesis se implanta desde la cara interna de la rodilla para preservar el músculo cuádriceps

El enfermo camina a las 24 horas de la operación y mueve la rodilla hasta 90 grados

José Luis Vilanova Vázquez, jefe de Traumatología de Puerta de Hierro e impulsor de esta iniciativa, destaca que el 99% de los pacientes operados son mayores de 55 años y sufren desgaste articular por procesos reumáticos, principalmente artrosis. "Los resultados", añade, "son excelentes y el paciente empieza a andar a las 24 horas. Al tratarse de cirugía mucho menos cruenta que la desarrollada en la intervención convencional y la cirugía poco invasiva anteriormente practicada, la incisión o herida quirúrgica es mucho menor, del mismo modo que lo son el dolor posoperatorio y las eventuales complicaciones que pudieran surgir. Además, el paciente apenas tiene pérdida de sangre, con lo que la necesidad de transfusiones es prácticamente nula y la recuperación funcional es mucho más rápida. Todo ello incide directamente en una mayor comodidad para el paciente y en menores gastos sanitarios, puesto que disminuye notablemente la estancia hospitalaria".

La experiencia de Puerta de Hierro demuestra que el enfermo empieza a caminar a las 24 horas de la intervención, con un rango de movimiento de la rodilla de hasta 90 grados. Así, el tiempo medio de recuperación es de 24 horas, frente a las 48-72 horas que precisa la cirugía mínimamente invasiva convencional.

"Gracias a la nueva técnica podemos implantar la prótesis desde la cara interna de la rodilla y así preservar totalmente el músculo cuádriceps, que es la principal estructura motora de esta articulación", afirma el traumatólogo Pedro Torrijos Garrido.

Con todo, según este especialista, el periodo medio de ingreso hospitalario se reduce de cuatro o cinco días a sólo dos o tres, y también disminuye la necesidad de ejercicios de rehabilitación y su duración, pasando de dos o tres meses a seis semanas.

Torrijos explica que la nueva técnica "requiere la utilización de un material específico adaptado a la nueva vía de acceso. También exige el entrenamiento de los cirujanos, ya que este procedimiento es más complejo". No obstante, las prótesis, de aleación de titanio, son las mismas que se venían utilizando.

"Todo indica que este procedimiento mantendrán a largo plazo los buenos resultados que ya se habían alcanzado con los métodos tradicionales, con las ventajas añadidas de un menor riesgo de complicaciones, mucho menos dolor posoperatorio y una reducida estancia hospitalaria", añade.

El hospital Puerta de Hierro es el centro de referencia del área sanitaria 6 de Madrid, en cuya zona se encuentran ubicadas unas 500 residencias geriátricas. Hasta ahora se han realizado más de 325 artroplastias totales de rodilla, que es la implantación de prótesis articular más demandada, por delante de la de cadera. De ellas, se han realizado con cirugía mínimamente invasiva convencional en torno a unas 60 intervenciones, y con el método quad sparing, llamado a sustituir a la anterior, otras 75 operaciones desde noviembre de 2004, todas con excelentes resultados.